¿Solo por eso lo quieren? Los medios ingleses insinúan que la motivación más importante que existe en Everton al tratar de conseguir los servicios del técnico portugués Nuno Espíritu Santo es su experiencia frente al manejo de planteles austeros.
Porque esa, parece, es la consigna del club. Poca inversión, mejor aprovechamiento de lo que tiene. Everton ha gastado mucho en los últimos años, sin resultados deportivos. Con Carlo Ancelotti la última temporada lo dejó situado en la décima casilla, privado de ir a un certamen continental. Si alguien dice “fracaso” no ofendería.
Por ello, frente al dilema que implica la contratación de un técnico uno de los principales requisitos es que sea alguien afín a la idea de “trabajar con lo que hay”. Tal parece que no habrá inversión considerable en reformar la plantilla.
Dentro de los candidatos que surgen, el mejor posicionado en estos momentos, dado el condicionamiento interpuesto, es Nuno Espiritu Santo. Es el máximo candidato que encuentran los Toffees. Viene de un ciclo positivo en el Wolverhampton, donde con menos presupuesto que el Everton logró mejores campañas.
Salvo la última temporada en la que cerró en el puesto 13, los Wolves se manejaron correctamente en medio de una competencia donde no solo hay valor desde lo deportivo. Cuesta sobrevivir al lado de equipos con chequeras poderosas y quien haga de la austeridad un aliado tiene crédito en la competición.
Por ahí va el asunto con el nuevo director que tenga el Everton. Cuentan que las negociaciones van bien y avanzan en procura de confirmar pronto quién se encargará, entre otros, de dirigir a James Rodríguez y Yerry Mina.