La herida por la final perdida de la Copa BetPlay aún está fresca, pero en Deportivo Independiente Medellín no hay margen para la parálisis. La dirigencia y el cuerpo técnico entendieron rápido que el 2026 exige reacción inmediata, planificación y decisiones firmes. Con múltiples frentes abiertos —Liga, torneos locales y Copa Libertadores—, el Poderoso comenzó a rearmar su proyecto deportivo con movimientos concretos.
Mientras avanza con paso firme la llegada del arquero uruguayo Salvador Ichazo, procedente del Deportivo Pereira, el DIM ya cerró su primer refuerzo ofensivo: el delantero Yony González, quien llega como agente libre tras finalizar su vínculo con Águilas Doradas.
Yony González, un refuerzo con recorrido y actualidad
A sus 31 años, Yony González aterriza en el Atanasio Girardot respaldado por una temporada sólida. En su paso reciente por Águilas Doradas mostró una versión renovada, tanto en lo futbolístico como en lo físico, dejando atrás problemas musculares que en el pasado habían condicionado su continuidad.
En el último año, el atacante antioqueño anotó 10 goles, y dio 2 asistencias en 36 juegos; además de aportar intensidad, recorrido por banda y sacrificio táctico. Su llegada al DIM marca su quinto club en el Fútbol Profesional Colombiano, tras vestir las camisetas de Envigado FC, Junior de Barranquilla, Deportivo Cali y el propio conjunto dorado.
Para el Medellín, no se trata solo de números, sino de incorporar un jugador probado, con experiencia y capacidad de adaptación inmediata.

Una carrera internacional que suma jerarquía
Aunque en Colombia siempre ha mantenido un perfil bajo, la carrera internacional de Yony González es extensa y respetable. En Europa tuvo paso por el Benfica y el Portimonense de Portugal, además de una breve experiencia en la MLS con LA Galaxy.
Sin embargo, fue en Brasil donde consolidó buena parte de su recorrido, defendiendo los colores de clubes importantes como Fluminense, Corinthians, Ceará, Atlético Goianiense y Paysandú. Ese bagaje internacional fue determinante para que el DIM apostara por su fichaje, entendiendo que la Copa Libertadores exige futbolistas curtidos en escenarios de alta presión.
Un delantero polifuncional que encaja en la idea de Restrepo
El visto bueno del técnico Alejandro Restrepo fue inmediato. El entrenador valora especialmente la polifuncionalidad de González, un rasgo clave para el modelo de juego que pretende implementar en 2026.
Yony puede desempeñarse como:
- Extremo, atacando desde la banda
- Media punta, jugando detrás del centro delantero
- Delantero centro, ocupando el área y fijando centrales
Esa versatilidad táctica permite múltiples variantes ofensivas y le da al cuerpo técnico una solución inmediata a diferentes escenarios de partido.
Yony será el relevo de Jáder Valencia
La llegada de González también responde a una necesidad puntual dentro del plantel. En el DIM ya asumen que el ciclo de Jáder Valencia está cerca de concluir. El atacante, que llegó hace seis meses desde Millonarios, nunca logró adaptarse al sistema de Restrepo ni consolidarse como alternativa confiable en el frente de ataque.
La idea del club es buscarle salida a préstamo en el corto plazo y que su rol sea asumido por un jugador con mayor recorrido, jerarquía y conocimiento del oficio, perfil que encaja perfectamente con Yony González.
Contrato cerrado y decisión tomada por Libertadores
Según se conoció, el delantero firmó contrato con Independiente Medellín hasta diciembre de 2027, asegurando así dos temporadas completas con el club antioqueño. La decisión no fue sencilla: Millonarios también presentó una propuesta formal que mantuvo al jugador en evaluación durante varios días.
Finalmente, dos factores inclinaron la balanza: la posibilidad de disputar la Copa Libertadores y el deseo familiar de permanecer en su tierra. Con eso claro, el DIM se adelantó y cerró a su primer refuerzo confirmado para 2026.
El mensaje es claro: Medellín no quiere repetir errores recientes y empezó a construir su nuevo proyecto con decisiones rápidas, experiencia y nombres que lleguen a competir desde el primer día.




