El FC Barcelona afronta una vez más un verano marcado por los problemas del ‘fair play’ financiero y las dificultades para inscribir a todos sus fichajes en LaLiga. Aunque el estreno en la temporada 2025-26 dejó buenas sensaciones en el campo, el ambiente en los despachos es de máxima tensión y la paciencia del técnico Hansi Flick comienza a agotarse.
A tres días del partido contra el Levante, la directiva culé trabaja a toda velocidad para dar de alta a los jugadores pendientes y evitar un inicio de campaña condicionado por las limitaciones administrativas.
Las prioridades de inscripción
El Barça ya logró registrar a Joan García y Marcus Rashford, quienes debutaron en el triunfo contra el Mallorca, pero aún quedan futbolistas a la espera. Por orden de urgencia, la lista está encabezada por Gerard Martín, Wojciech Szczęsny y Roony Bardghji. El caso de Marc Bernal no preocupa tanto, pues su regreso tras lesión está previsto para septiembre y podría inscribirse como jugador del filial.
La inscripción de Gerard Martín, de 23 años, depende directamente de la salida de Oriol Romeu, cuya rescisión de contrato parece encarrilada. En el caso de Szczęsny y Bardghji, sus llegadas quedarían habilitadas con las operaciones de Iñaki Peña y Héctor Fort, ya sea vía cesión o venta, con el Aston Villa como posible destino para el lateral de 19 años.
Flick eleva la presión sobre la directiva
El técnico alemán no ha ocultado su disgusto por la lentitud en los trámites. Aunque su mensaje fue medido, Flick dejó claro que espera soluciones inmediatas. Su deseo es contar con todas las piezas lo antes posible, consciente de que cada demora le resta variantes en una plantilla que aspira a revalidar títulos.
Desde fuera, todo parece ideal: un equipo campeón, reforzado y con jóvenes de proyección, además de un inicio de liga prometedor con goleada incluida. Sin embargo, internamente los problemas se acumulan. A las inscripciones pendientes se suman los retrasos en la remodelación del Camp Nou, que sigue sin fecha definitiva de reapertura.
El papel clave de las salidas y renovaciones
Para liberar margen, la directiva avanza en la ampliación de contrato de Frenkie de Jong, operación que, como en su momento ocurrió con Jules Koundé, permitirá habilitar espacio para nuevas inscripciones. También podrían influir las salidas de los canteranos Guille Fernández, en la órbita del Borussia Dortmund, y Dani Rodríguez, pretendido por el Valencia CF.
El gran interrogante sigue siendo Marc Casadó. Con apenas 21 años, es seguido por varios clubes europeos, y una venta millonaria otorgaría al Barça el oxígeno financiero que necesita. No obstante, tanto el club como el propio jugador desean evitar esa medida extrema.
Una recta final de mercado caótica
El escenario anticipa un cierre de mercado complejo. Con la presión del calendario, las operaciones pendientes y las restricciones económicas, el FC Barcelona necesita concretar salidas y renovaciones en cuestión de días para cumplir con las exigencias de LaLiga.
Flick, por su parte, no quiere excusas: ha lanzado un mensaje claro a Joan Laporta y Deco. Para competir al máximo nivel, exige disponer de todos los refuerzos que entrenan bajo sus órdenes. El desenlace de estas gestiones definirá si el equipo blaugrana arranca la temporada con plena capacidad o arrastrando lastres burocráticos.