Como todo un sueño, así fue el debut de Bogotá Élite en una nueva temporada de la Liga BetPlay de Fútsal. Desde que nació este conjunto bogotano hace dos años, la mira estaba puesta en participar en la competencia profesional y hacerlo mostrando lo mejor del talento de la capital. El sueño se convirtió en realidad. Un contundente triunfo en condición de local, 5-1 ante Academia Central, marcó el inicio de una temporada en la que seguro dará mucho de qué hablar.
Y es que ser debutante en una liga tan competitiva, con fuertes equipos e importantes jugadores, no es nada fácil. Pero este conjunto capitalino tiene una combinación ganadora: deportistas experimentados, jóvenes con mucha entrega y la solidaridad de ser una familia, más que un equipo. Y todo esto quedó demostrado en el terreno de juego. Se vio un equipo compacto y sólido, con un objetivo claro: demostrar que en Bogotá se juega buen fútbol sala.
El primer tiempo el equipo salió a proponer, pero la ansiedad de empezar a jugar la liga los llevó a olvidar la idea principal del modelo de juego que caracteriza al club, generando espacios para que su rival tuviera algunas llegadas.
Sin embargo, los bogotanos siempre buscaron el gol y este llegó de los pies del capitán Steven Cetina, que siempre comandó al equipo, aprovechando su amplia experiencia. Después de la anotación, el rival se lanzó al ataque y logró concretar una única llegada en los últimos segundos, mandando al descanso con igualdad a un tanto.
En el camerino la historia cambió. Las palabras del cuerpo técnico fueron fundamentales para que los jugadores hicieran las cosas diferentes en el segundo tiempo. “Necesitábamos que ellos estuvieran más tranquilos, que no jugáramos sin sentido. Había necesidad de que todos tuvieran mentalidad arrolladora, porque sin esa mentalidad, no hay triunfo”, contó el entrenador Oswaldo Aguilar.
Inició el segundo tiempo y la mejoría fue notoria. Bogotá Élite dominó el balón y muy rápido volvió a tomar ventaja con gol de Carlos Hernández. Pero la cuenta no paró.
Gracias a una presión alta, generación de juego en el campo rival y pases largos, llegaron tres tantos más: uno de Juan Camilo Quiroga, otro de Brian Castaño y uno más de Carlos Hernández. 5-1 fue la cuenta total. Por destacar, el buen trabajo que realizó desde atrás, con un portero concentrado y seguro cuando se necesitó y jugadores que tuvieron una buena recuperación del balón cuando su rival se acercó.
Ahora el conjunto bogotano se alista para su próximo juego. Tendrá frente a frente a uno de los equipos con más historia en la competencia: Utrahuilca, a quien visitará el próximo fin de semana en la ciudad de Neiva. Un compromiso en el que la concentración y seguridad serán fundamentales para ganar tres puntos como visitantes y seguir dejando en alto el fútsal bogotano.