El fichaje de Ander Herrera por Boca Juniors no solo enciende la pasión de los hinchas, sino que revive una rica tradición: la presencia de futbolistas europeos que, en diferentes épocas, han protagonizado capítulos contrataciones inolvidables en la historia del club. La llegada del mediocampista español, exjugador del Manchester United y PSG, promete ser un nuevo episodio en esta conexión entre Europa y La Bombonera.
Desde los primeros días en que Boca Juniors comenzó a forjar su identidad como uno de los gigantes del fútbol sudamericano, los jugadores nacidos en el viejo continente han tenido un impacto particular. Con Herrera como la incorporación más reciente, es el momento perfecto para recordar las historias de otros europeos que también vistieron la azul y oro.
Ander Herrera: un sueño hecho realidad
El fichaje de Ander Herrera ha sido recibido con entusiasmo tanto por el jugador como por los hinchas xeneizes. Herrera, de 35 años, firmó contrato hasta diciembre de 2025 con opción a un año más y no ocultó su alegría al cumplir un sueño de niño: jugar en Boca Juniors.
Su llegada es vista como una oportunidad única para añadir experiencia y liderazgo al mediocampo de Boca. Proveniente del Athletic Club de Bilbao, Ander no solo trae calidad, sino también la mística que los jugadores europeos han sabido dejar en el club a lo largo de los años.
Daniele De Rossi: el legado del campeón mundial
Antes de Herrera, el italiano Daniele De Rossi marcó un precedente importante. En 2019, el campeón del mundo con Italia en 2006 sorprendió al mundo del fútbol al unirse a Boca Juniors. Aunque su estadía fue breve, su impacto en la hinchada y su dedicación al equipo dejaron una huella imborrable.
De Rossi demostró que la Bombonera no es solo un estadio, sino un destino soñado para los futbolistas de todo el mundo. Durante su tiempo en Boca, enfatizó cómo la pasión del club argentino supera cualquier comparación con las ligas europeas, destacando la atmósfera única que se vive en el fútbol sudamericano.
Los españoles, un vínculo que trasciende generaciones en Boca
La relación entre Boca Juniors y los futbolistas europeos no es nueva. En la década de 1930, el español Pedro «Arico» Suárez se convirtió en una figura legendaria al disputar 291 partidos y ganar 6 campeonatos con el club. Es referente histórico, conocido por su compromiso y garra, marcó el camino para futuras generaciones de jugadores europeos en Boca.
Décadas más tarde, otro par de españoles como Julio Alas y Pablo Trobbiani mantuvieron viva esta conexión, demostrando que, sin importar la distancia, el llamado de la Bombonera es universal. Alas solo estuvo 9 partidos e hizo parte del plantel que llegó a la final de la Libertadores 1963; y Trobbiani, hijo de Marcelo, nació en Elche y jugó 4 partidos con Bilardo como DT (1996).
Italianos, húngaros, belgas y más con la camiseta de Boca
Los nacidos en Italia tienen una presencia destacada en la historia del club: Nicolás Novello jugó entre 1966 y 1974. También figuran el genovés Francisco Priano, que disputó un único partido en 1909, Juan Brattina, oriundo de Gorizia, que jugó entre 1948 y 1949, y Mario Busso, quien formó parte del equipo entre 1918 y 1927.
Entre los casos más curiosos está Ferencz Sohn Sas, nacido en Budapest, Hungría. Este delantero jugó un Mundial con su selección en 1938 antes de llegar a Boca en 1939. En su breve pero impactante paso por el club, anotó 9 goles y creó un vínculo especial con Argentina: conoció a su esposa y se radicó en Buenos Aires hasta su muerte en 1988.
Otro caso inusual es el del belga Mikael Yourassowsky, lateral derecho que llegó desde el Anderlecht en 2004. Aunque solo disputó dos partidos bajo la dirección de Carlos Bianchi, su inclusión refuerza la diversidad de nacionalidades que han vestido la azul y oro.