Deportivo Cali no quiere improvisar en la elección de su nuevo entrenador tras la salida de Alfredo Arias. Por eso, su intención va directo a uno de los técnicos más respetados y exitosos del FPC: Alberto Gamero. Desde la dirigencia ya iniciaron contactos formales con el estratega samario, quien quedó libre a finales de 2024 tras cinco años de gestión con Millonarios.
La intención es clara: Gamero es el objetivo número uno para liderar el nuevo proceso deportivo del cuadro caleño. El club se mueve rápido y el DT ya dio una primera respuesta, según versiones periodísticas. Aunque existen diferencias económicas importantes, la conversación está abierta y el deseo mutuo existe. La operación está en marcha y mantiene en vilo a los hinchas verdiblancos.
El nuevo proyecto en Deportivo Cali apunta a un nombre fuerte
El ciclo de Alfredo Arias terminó con más dudas que certezas. Resultados irregulares y una falta de identidad clara llevaron a Deportivo Cali a buscar un nuevo comienzo, nuevamente con la intención de armar un proyecto sólido desde el banquillo. Por eso, desde el primer momento, la prioridad fue clara: ir por Alberto Gamero.
El técnico samario de 61 años es uno de los más experimentados del país, con un perfil que combina liderazgo, trabajo con jóvenes, y resultados. Sus últimos cinco años al frente de Millonarios lo consolidaron como uno de los técnicos más respetados del fútbol colombiano, no solo por los títulos, sino también por la forma de competir con planteles ajustados.
¿En qué va el interés de Deportivo Cali en Alberto Gamero?
Según el periodista Pipe Sierra, ya hubo contacto directo entre las partes. Deportivo Cali presentó su intención de contar con Gamero como su nuevo entrenador y comenzaron las conversaciones sobre condiciones contractuales. La respuesta del técnico fue positiva en términos deportivos, pero puso sobre la mesa algunos puntos que deben resolverse para avanzar.
Entre las exigencias de Gamero se destacan dos claves: estar al día en el pago de salarios para el plantel y contar con autonomía total en la toma de decisiones deportivas. Además, los números iniciales entre lo que ofrece el club y lo que espera el técnico todavía están lejos, aunque ambas partes estarían dispuestas a hacer esfuerzos para cerrar la brecha.
Un técnico con sello ganador y procesos sólidos en el FPC
Alberto Gamero no necesita presentación. Su recorrido como entrenador incluye pasos por Chía FC, Bogotá FC, Boyacá Chicó, Águilas Doradas, Deportes Tolima, Junior y Millonarios. A lo largo de su carrera ha conseguido seis títulos oficiales: tres Ligas (con Chicó, Tolima y Millonarios), dos Copas Colombia (una con Tolima y otra con Millonarios) y una Superliga (con el equipo embajador).
Más allá de los trofeos, su mayor mérito ha sido la construcción de procesos duraderos y competitivos, apostando por jugadores jóvenes y potenciando el rendimiento colectivo incluso en contextos adversos. Es justamente ese perfil el que seduce a Deportivo Cali, un club con necesidad urgente de reordenar su proyecto y confiar en un líder con visión a largo plazo.
Alberto Gamero, a la espera de una nueva posibilidad
En medio de un ambiente marcado por la incertidumbre y los cambios constantes de cuerpo técnico, la posibilidad de contar con Alberto Gamero genera ilusión. Su nombre representa estabilidad, trabajo serio y resultados comprobables. Para muchos hinchas, sería la primera gran señal de que el club está dispuesto a construir desde lo estructural, más allá de lo inmediato.
Además, la experiencia de Gamero en procesos similares -como los vividos en Tolima y Millonarios- lo hace ideal para liderar una etapa de transición, con jóvenes en formación y limitaciones presupuestales. Su capacidad para sacar el máximo rendimiento de planteles sin grandes estrellas es una virtud que puede marcar diferencia en un entorno como el actual del Cali.
¿Qué sigue en la negociación de Deportivo Cali?
Las conversaciones entre Deportivo Cali y Alberto Gamero siguen activas. No se trata de una negociación sencilla, pero sí habría voluntad. El club sabe que necesita dar señales fuertes y coherentes con su historia, y la llegada del samario sería una de ellas. Por su parte, el técnico no ha descartado la posibilidad y continúa escuchando, evaluando las condiciones para tomar una decisión.
En las próximas semanas se espera que las partes vuelvan a reunirse. Si logran acercar las cifras y el club garantiza los requisitos planteados por el entrenador, la operación podría cerrarse. El deseo está, la prioridad está clara y la expectativa crece. Cali se ilusiona con tener a Gamero en el banquillo y volver a construir desde la solidez que él representa.