Avilés Hurtado, en apenas 3 partidos, ya se ha convertido en futbolista determinante para Deportivo Cali. A sus 38 años, el atacante caucano no solo ha respondido con goles y rendimiento en la cancha, sino que también ha dejado declaraciones que han resonado con fuerza entre los hinchas verdiblancos.
Desde su elección del dorsal hasta sus palabras sobre América de Cali, equipo en el que debutó profesionalmente, Avilés ha dejado claro que su presente está plenamente identificado con el equipo que dirige Alberto Gamero. En sus primeros juegos participó directamente en tres de los cuatro goles que ha marcado el equipo, con dos anotaciones y un penalti provocado. Y lo más importante: volvió a sentirse en casa.
El porqué del dorsal 18 de Avilés Hurtado en Deportivo Cali
Cuando Avilés Hurtado anunció que usaría el dorsal 18 en su regreso al fútbol colombiano, lo hizo con un propósito claro. No se trató de una elección al azar ni de una tradición cualquiera. Fue un homenaje profundo, cargado de emoción y sentido familiar. En entrevista con Deportes sin Tapujos, explicó el motivo: “El 18 es en honor a mi papá. Él falleció un 18 y siempre lo he llevado en mi espalda”.
El delantero confesó que ha intentado representar a su padre en cada club en el que ha estado y que, cuando ha podido usar ese número, siempre se ha sentido más motivado. En Deportivo Cali, donde encontró el número disponible, sintió que era el lugar ideal para volver a hacerlo: “Además viene con ñapa porque él era hincha del Cali. Es una motivación extra”.
La verdad de Avilés Hurtado sobre América de Cali
Avilés debutó en el fútbol profesional con América de Cali, entre 2009 y 2011 y dejó un buen recuerdo entre sus hinchas. Sin embargo, su sinceridad sobre lo que siente realmente sorprendió a muchos con lo que dijo en la entrevista ya mencionada. En sus propias palabras: “No soy hincha de América, le tengo mucho cariño y le agradezco porque me dio la oportunidad de debutar en el primer equipo, pero me debo a Deportivo Cali y voy a muerte con el Cali”.
Su frase no pasó desapercibida. A pesar del respeto por el club escarlata, dejó claro que su vínculo emocional más profundo está con el cuadro verdiblanco. La familia de su esposa y su propio padre eran fieles seguidores del Cali, y para Avilés, regresar a ese entorno, a su ciudad y al equipo que representa a quienes lo rodean, es algo que siente como un sueño.
El regreso de Avilés Hurtado al FPC tras jugar el Mundial de Clubes
Antes de ser anunciado por Deportivo Cali como uno de los 14 fichajes para el segundo semestre de 2025, Avilés venía de una experiencia particular en el fútbol mexicano. Jugó con Pachuca el Mundial de Clubes, certamen al que fue contratado exclusivamente para disputar. Solo estuvo un mes en el equipo, jugó 33 minutos ante Al Hilal en el cierre de la participación del cuadro mexicano y luego regresó a Colombia.
Tras más de una década en el fútbol de México, con pasos por equipos como Tijuana, Monterrey, Chiapas, Juárez y el mismo Pachuca, su retorno al FPC parecía poco probable. Pero Deportivo Cali apostó por él como parte del proyecto de reconstrucción que lidera Gamero. Y en pocos partidos ha demostrado que aún tiene mucho por aportar.
Un rol clave en el nuevo Deportivo Cali
Con goles ante Fortaleza CEIF y Atlético Bucaramanga, además de generar un penalti, Avilés ha sido el jugador más decisivo del equipo en ofensiva. Su presencia en el ataque no solo ha traído goles, sino también liderazgo, inteligencia táctica y capacidad de asociarse con los volantes. Es uno de los referentes que Alberto Gamero valora especialmente en una plantilla con muchos jugadores jóvenes.
Deportivo Cali, que venía de una difícil racha sin triunfos, logró su primera victoria de la Liga BetPlay II-2025 con goles de Estupiñán, Reina y el propio Avilés. Esa actuación confirmó que el delantero no solo llegó por su nombre, sino por su presente y el impacto real que puede tener en la campaña.
Un mensaje que ilusiona a la hinchada de Deportivo Cali
Las palabras de Avilés, su homenaje familiar, su identificación con la camiseta y su aporte inmediato en cancha han hecho que la hinchada de Deportivo Cali lo reciba como un símbolo de esta nueva etapa. Para un club que viene de años complejos en lo económico y lo deportivo, encontrar jugadores que además de experiencia, transmitan compromiso y corazón, es fundamental.
El dorsal 18 que lleva en la espalda representa una historia personal, pero también el deseo de Avilés de dejar huella en el equipo que ahora defiende. Y mientras su presente sigue en construcción, lo cierto es que en Palmaseca ya lo sienten como uno de los suyos.