Luego de un año con un estilo de juego basado en la intensidad física y la seguridad entre líneas, bajo las órdenes de César Farías, Junior de Barranquilla busca reencontrarse con su esencia: el buen trato del balón. Para ello, ha apostado por Alfredo Arias, un entrenador que conoce muy bien el entorno del FPC y que, aunque no ha levantado títulos en Colombia, ha dejado siempre una huella futbolística reconocible.
Junior FC: el regreso del balón al protagonismo
Desde hace dos semanas, Arias lidera la pretemporada rojiblanca con el objetivo de imprimirle a su nuevo equipo un modelo de juego que priorice la posesión, la circulación inteligente y la toma de decisiones correcta en campo rival. En sus primeras sesiones en Barranquilla, el técnico ha enfatizado en el trabajo con balón, haciendo repetitivos ejercicios de posicionamiento ofensivo, salida limpia desde el fondo y movimientos coordinados de apoyo.
Más allá del ideal de juego, Arias también ha demostrado que no negocia la intensidad. A pesar del enfoque estético, el DT quiere que su equipo corra, presione y aproveche el calor local como factor diferencial. Ha sido claro con sus jugadores en que el talento no excluye el sacrificio, y ha corregido en plena cancha a quienes bajan la intensidad, sin importar su nombre o trayectoria.
Alfredo Arias: un entrenador con estilo y discurso claro
Arias llega a su cuarto equipo en Colombia tras haber dirigido a Deportivo Cali, Independiente Santa Fe y el DIM. Si bien los títulos se le han escapado, ha sabido construir equipos competitivos, organizados y fieles a una idea de juego. Basta recordar el Medellín de finales de 2023, que disputó el título justamente ante Junior, y que se destacó por su intensidad, orden y momentos de gran expresión técnica.
Además del modelo de juego, su comunicación es otro punto fuerte. En cada rueda de prensa, Arias ha demostrado un discurso sereno, con un dominio impecable del idioma y sin recurrir a frases rimbombantes o poses de técnico infalible. Su lenguaje inspira respeto, pero sobre todo, cercanía.
Junior de Barranquilla quiere volver a sus raíces
La elección de Arias responde, en gran medida, al deseo institucional y de la hinchada de reconectar con el ADN histórico del equipo: la tenencia, el juego de elaboración y los ataques por abajo. La era reciente con César Farías, si bien fue intensa y por momentos efectiva, fue también distante de lo que el aficionado barranquillero ha valorado tradicionalmente.
Con una plantilla aún en construcción y un estilo que comienza a marcarse desde la pretemporada, Junior apuesta a que Arias sea más que una ilusión. El entorno sabe que la exigencia será inmediata, pero el entrenador uruguayo no desconoce la presión de dirigir un club grande en Colombia. De su capacidad para adaptar su libreto a la idiosincrasia barranquillera dependerá, en gran parte, que este nuevo ciclo pueda transformarse en algo más que una buena intención.