Un día antes del partido de Champions League ante Liverpool, el DT del Bayern Múnich habló (y fuerte), de James Rodríguez. El mensaje estaba claro. El colombiano tiene que agregarle algo a lo que ya le ofrece al juego.
“James Rodríguez está bien últimamente, pero estoy convencido de que puede hacer más. Se esfuerza en defensa, pero aún puede ayudar más y ser más directo con la pelota (…) Necesito eso de él. Conocemos sus cualidades con el balón”, dijo Kovac.
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Al día siguiente de decirlo, envió al colombiano a la cancha como titular en el partido de octavos de final de la Champions League entre Liverpool y Bayern Múnich. ¡Y James Rodríguez fue de lo mejor de la cancha! Eso sí, hablando de lo que hizo el cuadro alemán y la labor que pretendió el DT.
Esta vez el plan era mantener un orden y no ser demasiado ofensivos. Al frente estaba uno de los equipos más efectivos del momento. Niko Kovac pensó en controlarlo y eso pasó, con James Rodríguez logrando una labor importantísima ahí. Las cifras lo demuestran.
James Rodríguez jugó 87 minutos. Recorrió 10.98 kilómetros. Hizo 45 pases con el 93% de precisión. Ganó 3 de 7 duelos, logró 2 intercepciones e hizo 3 despejes en campo propio. Eso quería Niko Kovac y eso hizo.
Starkes Spiel, Jungs!
