Real Madrid ha hecho oficial un movimiento que trasciende lo simbólico: Kylian Mbappé usará la camiseta número 10 en la temporada 2025-26. Es un gesto que refuerza su jerarquía dentro del nuevo proyecto liderado por Xabi Alonso, una confirmación del estatus que tiene el francés dentro del club apenas semanas después de su presentación.
Pero más allá de la estrategia de marketing, la elección del dorsal también conecta a Mbappé con una historia rica en talento, magia y responsabilidad. La camiseta 10 del Real Madrid no es cualquier número. Es una prenda que han vestido algunos de los jugadores más creativos y determinantes del fútbol mundial. Y que representa una herencia de clase, liderazgo y visión de juego.
Kylian Mbappé y la camiseta que soñó desde niño
La imagen de Mbappé luciendo la 10 blanca ya es una realidad, aunque su conexión con ella no es nueva. En su autobiografía ilustrada «Je m’appelle Kylian», publicada en 2021, aparece con la camiseta 10 del Real Madrid en una escena ambientada en el Santiago Bernabéu. En esa página, el joven Kylian le confiesa a su padre que visitar el estadio fue el mejor día de su vida. Hoy, esa predicción adquiere un nuevo significado.
En Francia, la 10 ya era su dorsal desde que se consolidó como estrella de la selección. Al igual que Zinedine Zidane en su momento, Mbappé se adueña del dorsal tanto en el plano internacional como en el club más grande del mundo. Para el Real Madrid, es una jugada potente a nivel de imagen: unificar el número de su jugador franquicia refuerza el relato y facilita una explotación comercial más poderosa.
Luka Modrić, el último 10 de leyenda en Real Madrod
Mbappé recibe el dorsal de manos de Luka Modrić, quien lo llevó durante ocho años, entre 2017 y 2025. El croata se convirtió en una leyenda madridista con él a la espalda, ganando cinco Champions League y el Balón de Oro en 2018. Modrić dotó al número 10 de una elegancia y regularidad pocas veces vista en la historia del club. Su marcha al AC Milan marca el cierre de una era, y abre paso a una nueva que comenzará con Mbappé como símbolo.
Los otros cracks que vistieron la 10 de Real Madrid
Antes de Modrić, la camiseta tuvo una línea continua de futbolistas de enorme talento. Cada uno, con su estilo particular, dejó una huella en la memoria del madridismo:
- James Rodríguez (2014–2017): El colombiano deslumbró en su primer año tras el Mundial 2014. Goles, asistencias y carisma que le valieron el 10 en su llegada.
- Mesut Özil (2011–2014): El alemán fue sinónimo de visión, asistencia y clase. Se convirtió en una pieza clave en la primera etapa de José Mourinho.
- Lassana Diarra (2009–2011): Aunque su perfil era más defensivo, el francés tuvo un papel importante en el mediocampo blanco durante su paso.
- Wesley Sneijder (2008–2009): El neerlandés llegó como gran promesa y brilló por momentos con su pegada y claridad.
- Robinho (2005–2008): El brasileño encendió la ilusión con su talento. Aunque irregular, fue un jugador desequilibrante.
- Luis Figo (1999–2005): Probablemente el 10 más influyente antes de Modrić. Balón de Oro, ídolo de la afición y emblema de los “Galácticos”. Fue él quien inició la secuencia gloriosa del dorsal en la era Florentino.
La herencia que ahora carga Mbappé en el madridismo
El dorsal 10 es sinónimo de responsabilidad. Representa al jugador que asume el peso de los partidos, que inventa en los momentos más cerrados, que se convierte en la cara visible del equipo dentro y fuera de la cancha. Mbappé no solo hereda un número, sino una historia que lo desafía a inscribir su propio capítulo glorioso.
Todo está listo para una nueva era. Desde ya, en el Bernabéu se espera escuchar con fuerza: “Y con el número 10… ¡Kylian Mbappé!”. Una frase que marcará el inicio de una etapa que mezcla pasado y futuro, tradición y modernidad, legado y ambición. El 10 ya tiene nuevo dueño. Y la historia continúa.