Julio Comesaña hizo sus maletas y habló de todos: de por qué no volvería a Junior, la mala estructura del club, la familia Char, Juan Cruz Real, los hinchas…
Cabaret. Quizá esa sea la mejor manera de describir la forma en la que se viene manejando el Junior de Barranquilla. En un arrebato de impulsividad de parte y parte, Julio Avelino Comesaña se fue del equipo a falta de tres partidos para terminar los cuadrangulares semifinales. Diferencias muy marcadas con Don Fuad Char Abdala hicieron que el DT más ganador de la historia del club se fuese de forma poco elegante. Por supuesto, Pelo e’ burra no se calló.
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Las declaraciones más picantes de Comesaña en su salida de Junior
“Yo no renuncié, me sacaron. A mi me sorprendieron en la tarde de ayer, porque veníamos hablando del futuro del equipo. El presidente del club me llamó y me citó para decirme que ya no iba más. Me sorprendió porque el lunes estuvimos reunidos para confirmar lo del profeso Franco, al que hicieron venir desde Uruguay”
“Quiero decir 2 cosas puntuales de cómo llegué a Junior para que dejen de decir mentiras y bobadas. La primera es que yo hablé 2 horas con Juan Cruz cuando él vino acá, le expliqué algunas cosas. Enseguida me ofrecieron llegar al equipo, lo pensé y les comenté a la directiva que me parecía una decisión equivocada (sacar a Juan Cruz). Segundo, yo tomé el equipo y los objetivos eran clasificar a la final de la Copa y entrar a los ocho”
“Ya no es sufrimiento, es un calvario. Nunca conversé tanto con la parte alta del club como en estos tiempos. Yo les dije que buscaran un entrenador y seguro lo estuvieron haciendo. Las formas de las personas nos desnudan como somos, es el ser, no el hacer. ¿A quién le va a gustar estas maneras? Si el lunes hablamos algo y ayer vino una persona con la que no había hablado (Presidente de Junior) a decirme que yo no continúo. Tampoco pregunté las razones”
“Ya no más, yo tengo que ponerle punto final a esta situación. Estoy muy grande ya y no estoy para hacer haciendo este trabajo con las mismas dificultades. Estoy más para otro tipo de cargos. No me gusta delegar, no soy un director de orquesta. Me gusta a mí asumir la responsabilidad, debo estar comandando. No puedo ser un mánager. Ya está bueno esto, no vuelvo más a Junior. No debería ni volver a dirigir”
“Como ser humano me mortifican las formas de Junior. Es imposible que yo sea director deportivo por la conformación dirigencial de Junior, acá hay personas que gobiernan y que toman las decisiones. Yo no soy el más simpático para hacer cosas que otros determinan. El cargo mío es vivir la vida, los años que me quedan. Si no hay jugadores, ¿Qué hago? Más que un cambio en el estilo de juego acá se necesita otro estilo de vida. No vuelvo más”