La Selección Colombia ha entrado en una zona delicada en las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026. Lo que hace apenas unas fechas parecía un camino directo hacia la clasificación, hoy se ha transformado en un escenario incierto donde incluso el repechaje empieza a parecer una alternativa real. El equipo dirigido por Néstor Lorenzo no gana desde hace cinco partidos y ha visto reducirse su ventaja en la tabla.
El empate sin goles ante Perú en Barranquilla fue el más reciente de una racha preocupante. Sumado a eso, Venezuela superó 2-0 a Bolivia en Maturín y quedó a solo 3 puntos de Colombia. Con un calendario exigente por delante y sin margen de error, la posibilidad del repechaje ya no es descartada. Por el contrario, es una variable que se empieza a contemplar.
Selección Colombia: 5 partidos sin ganar y una clasificación a la expectativa
La Selección Colombia tuvo una ventaja importante en buena parte de la Eliminatoria, incluso ganándoles a Brasil y Argentina, producto de un proceso que había logrado mantener un invicto prolongado. Sin embargo, tras la derrota en la final de la Copa América ante los argentinos, el rendimiento se desplomó. En los cinco partidos recientes por Eliminatoria, la Tricolor no conoció la victoria.
El balance es crudo: tres empates y dos derrotas, incluyendo resultados que duelen por cómo se dieron y por los rivales directos involucrados. Contra Paraguay se dejó escapar una victoria parcial y ante Perú se mostró un juego estéril que desató la frustración de la hinchada. Es precisamente tras ese reciente resultado que surge la opción del repechaje como algo que podría aparecer en el panorama del club.
Venezuela presiona y cambia el mapa de la Eliminatoria
Mientras la Selección Colombia se estanca, Venezuela crece. El triunfo 2-0 sobre Bolivia le permitió sumar 18 puntos y ubicarse a solo tres de Colombia y Uruguay. El detalle que enciende todas las alarmas es que los venezolanos deben enfrentar a ambos rivales en lo que resta de clasificatoria.
Si el martes Venezuela vence a Uruguay en Montevideo y Colombia pierde ante Argentina en el Monumental, se generaría un triple empate con 21 puntos. En ese caso, la diferencia de gol definirá quién clasifica directo, quién va al repechaje y quién quedaría fuera, al menos temporalmente. Un panorama impensado hace apenas cuatro fechas.
El cierre del calendario: todo por definirse
La Selección Colombia tendrá que visitar a Argentina, recibir a Bolivia en Barranquilla y cerrar ante Venezuela como visitante. Tres partidos de máxima presión, en los que se debe recuperar el nivel y sumar al menos seis puntos para no depender de terceros.
El partido contra Bolivia, en casa, aparece como la oportunidad más clara para sumar tres unidades, pero no garantiza nada si no se acompaña con buenos resultados en las otras dos fechas. Venezuela, por su parte, tendrá un calendario de alta tensión que puede reconfigurar por completo la tabla (visitando a Uruguay y Argentina; y recibiendo a Colombia).
El repechaje: un plan B que ya no se puede ignorar
En este nuevo formato de clasificatoria, los seis primeros van al Mundial de forma directa y el séptimo disputará el repechaje internacional. La Selección Colombia, en este momento sexta, corre el riesgo real de caer una casilla si no hay una reacción inmediata. Por eso, lo que hace un par de meses era impensado, hoy es una conversación inevitable: la Tricolor puede verse obligada a jugarse su cupo por la vía larga.
Este nuevo escenario exige una planificación alternativa, pero también un enfoque urgente para evitarlo. No solo por la dificultad deportiva que implica, sino por el golpe emocional que representa para una selección que llegó a ser invicta durante más de 20 partidos.
La presión crece y el margen se achica para la Selección Colombia
A tres fechas del final, la Selección Colombia está contra las cuerdas. El rendimiento ha bajado, los rivales se acercan y la presión crece en cada partido. Ya no hay espacio para especulaciones: es ganar o quedar a expensas de otros resultados. Y en el peor de los casos, preparar un repechaje que ya nadie quiere, pero que ahora aparece con nombre propio en las cuentas de clasificación.
El equipo de Néstor Lorenzo tiene las herramientas para revertir el momento. Pero si no lo hace pronto, podrá ver desde muy cerca un escenario que hasta hace poco parecía solo una amenaza lejana: el repechaje rumbo al Mundial 2026.