Pocas veces había caído tan bien un alto en el camino para el Poderoso de la Montaña. El aplazamiento del partido del próximo fin de semana puede llegar a mejorar todo.
Después de la durísima derrota ante Nacional en Montevideo y del doble viaje ida y vuelta a Uruguay, era muy difícil enfrentarse a Once Caldas este fin de semana.
Por eso el concierto de reggaetón en el Atanasio Girardot le ha caído del cielo al equipo de David González. Esa pausa en medio de tantos partidos y de un cúmulo de emociones altas y bajas, es un bálsamo que puede servir para recomponer las cargas.
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Parar una semana en este momento de la temporada, estar en casa entrenando, preparar bien el viaje a Neiva para enfrentar al Huila, compartir con la familia y oxigenarse es un lujo y se le debe sacar buen provevho.
Será además una semana extra para recuperar jugadores lesionados. A pesar de que Luis Erney Vásquez ha respondido en la portería del Poderoso, es claro que Mosquera Marmolejo es claramente el titular. Es simplemente un arquero superior.
Tener a Éver Valencia más cerca de su regreso será una excelente noticia. Quién lo diría, hace apenas tres meses nadie quería saber nada de Valencia en el Medellín, y hoy es el jugador que más se extraña.
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Independiente Medellín viajará a Neiva y luego regresará a Medellín para enfrentar a Nacional en el clásico. Serán dos partidos que pueden definir la clasificación a los ocho.
Tener estos días de tranquilidad previos a la batalla pueden marcar la diferencia para bien en la plantilla del Rojo.
