La Comisión Disciplinaria del campeonato no encontró elementos suficientes para comprobar que Jorge Luis Pinto se expresó en forma vehemente contra la hinchada del América de Cali.
El entrenador de Millonarios estaba en investigación por parte del Comité Disciplinario del Campeonato, debido a hechos ocurridos al final del compromiso contra América en el estadio Pascual Guerrero. Partido válido por la fecha 1 en los cuadrangulares semifinales.
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En el informe del comisario de campo quedó consignado una aparente provocación del entrenador a la tribuna, lo cual derivó en reacciones airadas en su contra.
En ese momento, acompañado por la policía, alguien le lanzó una botella de agua, interceptada en forma oportuna por uno de los agentes.
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El informe decía que Pinto provocó a la hinchada con mensajes fuera de lo deportivo. De allí que hubiese una respuesta hostil desde la grada más cerca al lugar donde se encontraba.
Se señaló al DT de haber causado estas reacciones, consecuencia de algunas palabras suyas. De allí que fuese citado para dar cuenta de lo sucedido. En la reciente resolución, el Comité explica a grandes rasgos los argumentos del entrenador santandereano:
“El señor Pinto de manera presencial declaró no haber provocado al público, afirmando que siempre estuvo acompañado del coronel de la policía, que se encontraba en el estadio quien fue la persona que lo guio para salir del campo de juego. De igual manera, reconoce que sus expresiones en ese momento fueron en privado y no estaban dirigidas a la tribuna, ya que se encontraba a aproximadamente a 20 metros de distancia de la tribuna al momento de salir del campo de juego”.
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La Comisión determinó, basada en este argumento y demás elemento en consideración dentro del proceso, que el comportamiento del entrenador no fue lo suficientemente enérgico y activo contra el público, como para ser acreedor de alguna sanción.
En consecuencia, no hay razón alguna para imponer alguna sanción, ordenando “el cierre de la investigación y “archivo de las diligencias”.