Peleas y reclamos de parte y parte en ‘El Campín’. Pereira pedía una falta en el área y Millonarios buscaba una expulsión en el rival.
Este lunes, Millonarios recibió en casa a Deportivo Pereira con el objetivo de tomar ventaja en el cuadrangular, pero este partido tampoco estuvo ajeno a las polémicas arbitrales. Apenas iban 18 minutos de juego cuando hubo reclamos por parte de los dos bancos para Wílmar Roldán. Los locales pedían una expulsión, mientras que la visita quería un penal a favor.
Todo se dio en el área de Álvaro Montero en un tiro de esquina. Pereira cobró y se vio claro como Óscar Vanegas le agarró la camiseta al ‘Pecoso’ Correa, quien terminó cayendo, pero de forma muy poco creíble para el cuerpo arbitral. El mismo Vanegas le fue a reclamar por dejarse caer, por lo que Correa se levantó y le dio un cabezazo al defensor cuando no estaba el balón en juego.
De inmediato todos comenzaron a reclamar. Unos pidiendo el penal, otros diciendo que no hubo falta, reclamando por la agresión y quejándose por la decisión final. Sin revisar el VAR, lo que Roldán decidió es que no hubo falta sobre el central del Pereira y que la reacción del mismo solo era meritoria de amarilla. Ni para el uno ni para el otro.
De acuerdo a lo reportado por analistas arbitrales, el juez antioqueño debió expulsar al Pecoso Correa y no hubo falta sobre él, pero Wílmar Roldán quiso darle continuidad al juego y no revisó las acciones en el monitor del videoarbitraje.