Orgulloso de sus jugadores y molesto con el arbitraje, Juan Cruz Real terminó enviándoles un mensaje a los árbitros: “Si queremos jugar al fútbol, deben ser menos permisivos”.
En este caso la queja fue por lo que pasó con Carlos Ortega (Bolívar) y su arbitraje en el Campín. El DT argentino de Junior habló de las reiteradas faltas del rival y, sobre todo, del golpe de Yulián Anchico que sacó del partido a Walmer Pacheco (no hubo ni amonestación). Basado en eso se acordó de lo sucedido en el juego anterior de Junior y el tema reiterado con las infracciones.
Las respuestas de Juan Cruz Real
-“Estoy dolido por el resultado. Creo que el equipo se entregó mucho. Más allá del resultado quiero felicitar a mis futbolistas por la manera que vinieron a jugar a Bogotá. Creo que hicieron un muy buen partido. Las ocasiones más claras las tuvimos nosotros. Presionamos en campo rival, jugando en la altura”.
-“Respetando al rival, creo que se lleva un premio demasiado grande. Patearon de media distancia, la velocidad de la pelota, cosa que tenemos que analizar, pero me parece que el equipo hizo un muy buen partido, demostrando lo que hemos dicho: en todos lados vamos a salir a jugar de la misma forma. Este es el camino”.
-“Nos duele perder de esta forma por las ocasiones claras que tuvimos. Nos faltó un poquito de eficacia. No se olviden que tuvimos muchos inconvenientes. Jugadores convocados a la Selección y la situación con Freddy Hinestroza que quiero reconocer públicamente: se bajó de un avión, jugó 30 minutos e hizo un gol”.
-“En la entrada en calor lamentablemente Fernando Uribe tuvo una molestia. Miguel Borja estuvo jugando en la Selección”.
-“La patada a Walmer Pacheco es expulsión por fuerza desmedida. Vean la imagen y se darán cuenta y lo digo porque el jugador tiene un esguince y no sabemos si va a tener fractura. No sé cómo se miden las jugadas”.
-“No me quiero meter con los árbitros, pero hay que tener cuidado. En el partido pasado nos doblaron en faltas. Fue sistemático y hoy el rival hace el 60% más de faltas. Esa patada es con alevosía y no pasa nada. Si queremos jugar al fútbol, los árbitros deben ser menos permisivos”.
