La noche en Barranquilla terminó de la peor manera para Néstor Lorenzo. Luego del empate 2-2 entre la Selección Colombia y Paraguay, en la fecha 14 de las Eliminatorias Sudamericanas al Mundial 2026, el estratega argentino abandonó el estadio Metropolitano Roberto Meléndez en medio de una lluvia de silbidos y rechiflas por parte de la afición.
Ambiente tenso en el estadio Metropolitano
El resultado dejó un sinsabor en los hinchas, quienes vieron cómo Colombia desperdició una ventaja de 2-0 y terminó cediendo un empate en condición de local. El público, visiblemente molesto, no tardó en expresar su descontento al final del partido, dirigiendo sus reclamos al entrenador argentino.
El momento más tenso se vivió cuando Lorenzo se dirigía al túnel de los vestuarios. Mientras caminaba por la zona técnica, los hinchas lo despidieron con silbidos y abucheos, dejando en evidencia el descontento por los recientes resultados de la Tricolor, que ya acumula cuatro partidos sin conocer la victoria en estas Eliminatorias.
La afición pierde la paciencia con Néstor Lorenzo luego del empate
El malestar de los hinchas no solo responde al empate ante Paraguay, sino también a la seguidilla de malos resultados. Colombia venía de perder contra Uruguay, Ecuador y Brasil, y aunque sigue en zona de clasificación directa al Mundial de 2026, el rendimiento del equipo genera muchas dudas. Las decisiones de Lorenzo, especialmente en cuanto a los cambios y la gestión del juego, han sido duramente criticadas por la prensa y la afición.
El panorama se complica aún más para el entrenador, quien deberá recomponer el rumbo de la Selección en las próximas fechas para recuperar la confianza del público y asegurar la clasificación sin sobresaltos.
¿Qué sigue para Colombia en la Eliminatoria al Mundial 2026?
La Tricolor cerrará su camino en las Eliminatorias enfrentando a Perú y Bolivia en casa, dos selecciones que, en el papel, no deberían representar mayor peligro. Sin embargo, el equipo también deberá visitar a Argentina y Venezuela, en partidos que podrían ser determinantes en la tabla de posiciones.
La presión sobre Néstor Lorenzo es cada vez mayor, y el episodio de los abucheos en Barranquilla refleja que el crédito con la afición se está agotando. Ahora, el entrenador argentino tendrá que demostrar que puede revertir la situación y devolverle a Colombia la confianza en su juego.