La Selección Colombia Femenina cumplió con el objetivo de ganar un cupo al Mundial de Mayores y las jugadoras siguieron con su lucha por la igualdad.
El país tuvo la oportunidad de organizar por primera vez la Copa América Femenina y los aficionados pudieron tener de cerca a la Selección que en varias oportunidades se vio de lejos y sin importancia. La realización del campeonato llevó a que gente que no tiene contacto cercano con el fútbol femenino, por lo menos preguntara “¿dónde se puede ver el partido? o ¿quiénes son las que juegan?”.
Colombia sin tener una cultura de fútbol femenino ha logrado en un mes, que las redes sociales y el público sepan sobre las dificultades que han sufrido desde el comienzo de sus carreras las futbolistas. El apoyo se dio gracias a la protesta que hicieron las jugadoras en el primer partido del campeonato debido a la no realización de la Liga en el país y que ellas no recibirían premios por su participación en la Copa. Muchos pretendieron ocultar este hecho pero el continente fue testigo y habló de lo sucedido.
Los resultados acompañaron la protesta
Con el paso del tiempo la exigencia de la Selección Colombia Femenina tomó más fuerza, pues conforme iba pasando la competencia, las jugadoras lograron avanzar de manera invicta y ganar sus partidos frente a Paraguay, Bolivia, Chile, Ecuador, Argentina y pudieron anotar 14 goles en estas fases. La ‘Tricolor’ llegó a la final demostrando algunas falencias, pero consiguió dos de los objetivos que se trazó el grupo.
A pesar de perder la final contra la favorita Brasil, el equipo dirigido por Nelson Abadía demostró que se puede jugar de igual a igual y pelear el partido. Un error defensivo, la individualidad de algunas jugadoras y la definición fueron las causas para que Colombia hoy no pueda decir que fue la campeona de la Copa América. El trabajo del entrenador tendrá que basarse en estos problemas para mejorar y no tener las mismas dificultades el próximo año.
Sin embargo hay que valorar que el equipo brasileño ya no le “pasa por encima” a la Selección, pero también se deben conseguir títulos que sigan dignificando la labor de las futbolistas y que se pueda dejar un referente para las nuevas generaciones que tendrán que seguir luchando por la igualdad ante el fútbol masculino.
Cali, Armenia y Bucaramanga cumplieron
La hinchada jugó un papel fundamental en el tema de apoyar a la Selección Colombia no solo en los partidos que jugó en las tres ciudades, sino que tuvieron la personalidad para protestar desde la tribuna y dejar un precedente en el tema del fútbol femenino. A pesar de que nadie habla del tema, con solo comprar una boleta para ver un juego, la afición hizo que la gente sepa que sí hay interés ante esta disciplina.
Cali tuvo la oportunidad de tener a la Selección en la fase de grupos y más de 16.000 personas asistieron en cada partido, en Armenia 12.000 fueron los que vieron al equipo confirmar su cupo a la semifinal y Bucaramanga cerró con broche de oro la participación de la ‘Tricolor’, allí la semifinal y la final la vivieron 22.000 hinchas que alentaron al grupo de jugadoras que no consiguió el trofeo, pero que pudo festejar el logro de clasificar al Mundial de 2023 y a los Juegos Olímpicos de 2024.
Como lo dijo la capitana, Catalina Usme cumplieron con el objetivo y ahora esperan mejorar su participación en una Copa del Mundo, para seguir creciendo y demostrar que el fútbol femenino sí es valorado, tiene seguidores y las jugadoras no son apoyadas solamente por sus familias.
Lo que sigue siendo claro es que aún con la falta de apoyo económico, las dificultades para que los equipos profesionales puedan formar procesos, la falta de organización por parte de la Dimayor en la Liga colombiana y el desinterés de los dirigentes, las personas de a poco han ido reconociendo la lucha que por años han llevado jugadoras y entrenadoras para tener igualdad salarial y condiciones.
El proceso continuará con las nuevas generaciones de jugadoras que llegarán para seguir demostrando que el fútbol femenino en Colombia puede ser de calidad y que se necesita urgente una Liga Femenina digna ya, para que las próximas selecciones se nutran de los procesos de equipos colombianos, puedan algún día ganar las finales y conseguir los títulos que muchos exigen.
Periodista, enamorada de la vida, mi familia y el fútbol. En Twitter pueden seguirme en @linamorenos20 o pueden escribirme a lina.moreno@futbolete.com
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