El defensor argentino se tiró sobre el balón y Wílmar Roldán pitó penal, pero echó para atrás su decisión mirando el VAR.
Se abría la puerta para el primer gol del clásico costeño entre Unión Magdalena y Junior de Barranquilla, pero se tomó una decisión arbitral que nadie entendió. Wílmar Roldán había señalado el manchón del punto penal pitando una mano de Emanuel Olivera, pero luego de revisar el monitor del VAR no quiso mantener lo que había dado inicialmente, pero nadie entendió lo que pasó.
El argentino quedó trastabillando sobre el suelo y cuando el balón iba en su dirección, terminó por caer y el balón le dio en la mano. Por otro lado, lo que se vio en la jugada es que Olivera se lanzó sobre el balón como si se tratara del portero. Cuando Roldán fue a mirar el VAR, se pensaba en una posible tarjeta roja, pero lo que hizo fue decir que no había penal.
No se entendió la razón por la que cambió la pena máxima. De acuerdo a lo que comentaron en la trasmisión de Win Sports, es que el balón venía de un compañero de Olivera, pero reglamentariamente no sería una justificación. El técnico Harold Rivera se terminó ganando la amonestación por los reclamos que estaban totalmente justificados.
https://twitter.com/Julian_Sierra43/status/1687955836939771904
Escándalo en este clásico mientras en redes sociales hasta los propios hinchas de Junior asumen que era una acción que merecía que se cobrase el penal. Polémica que se extenderá durante los próximos días mientras Wílmar Roldán estará pitando en Copa Libertadores entre semana en el partido entre Olimpia y Flamengo.
