No solo de títulos y una rica historia futbolera viven los grandes clubes. Galatasaray tiene una afición tan fiel, como irreverente, osada y en ciertos casos, violenta.
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¿Preparados para un show de luces, cánticos y anécdotas? Sigan leyendo porque esa es la sensación que produce cada una de las 7 pequeñas historias que les contaremos sobre la afición del Galatasaray
El estadio donde juega sus compromisos en condición de local, el Turk Telekom Arena, es considerado como uno de los más ruidosos del mundo. Consecuencia del ambiente generado por sus hinchas, los decibeles suben a niveles poco habituales.
Con motivo de un clásico por la liga turca contra el Fernerbahce, una de las tribunas del estadio fue adornada con la imagen de Rocky Balboa, el boxeador de ficción protagonista de una de las sagas de cine más famosas de la historia en cuanto a películas deportivas se refiere.
En diciembre de 2018 hicieron un banderazo descomunal. En un entrenamiento previo a un juego contra el Besiktas, otro de sus grandes rivales en Turquía, llenaron el estadio como si se tratase del mismo partido. Hubo cánticos y juegos artificiales, confirmando aquella denominación del “infierno de Estambul”, con la que también se han hecho muy famosos a nivel mundial.
Entrenamiento del Galatasaray antes de enfrentarse al Besiktas… ENTRENAMIENTO#OTDirecto1DIC #VivaLaVida148 pic.twitter.com/5StjXbpGOp
— UlToc16 (@RToc16) December 1, 2018
Para un compromiso de Champions League contra el Schalke 04, solo se dispusieron 2.700 entradas para los aficionados del Galatasaray. Varios de ellos, incómodos con la situación tras viajar desde Turquía, hicieron de “topos”. Aprovecharon uno de los entrenamientos del cuadro alemán en el Veltins-Arena para cavar un túnel e ingresar al escenario deportivo hasta que fueron interceptados por la policía.
Graeme Sounness, entrenador del Galatasary en 1996, una vez se coronó campeón con el Galatasaray por la Copa de Turquía hizo lo impensado. Nada menos que en el estadio de su archirrival, Fernerbahce, agarró una bandera, corrió hasta la mitad del campo y la clavó ante la reprobación de los aficionados locales. Ese día hubo incidentes muy fuertes. El hecho aún es recordado y hasta hace parte de la tradición entre los seguidores de la institución.
Jugadores que se han quedado grabados en los recuerdos de los hinchas del Galatasary y el holandés Wesley Sneijder, quien tenía la costumbre de coordinar los cánticos de la afición al final de los partidos. Uno de los mejores episodios de este “ritual” fue en octubre de 2015, cuando concluyó un compromiso de Champions League frente al Benfica.
También hay espacio para la solidaridad. A un hincha se le cayó su celular mientras hacía un video. El aparato fue a parar hasta el lugar donde estabas los fanáticos más ruidosos. Al darse cuenta de lo sucedido y ver el desespero del seguidor por recuperar su aparato, armaron una cuerda con bufandas para regresar el móvil.
A un hincha del Galatasaray se le cayó el celular desde la segunda bandeja mientras grababa un video y los de abajo hicieron todo lo posible para devolvérselo
