El primer amistoso de América de Cali en el 2025 terminó en derrota por 0-2 ante Melgar de Perú en Bogotá, dejando más preguntas que respuestas para el equipo dirigido por Polilla Da Silva. Aunque la pretemporada apenas comienza, el encuentro expuso carencias en áreas clave del plantel, confirmando que aún hay mucho trabajo por hacer.
Con la posible llegada de Juanfer Quintero y la búsqueda activa de un goleador, el cuadro escarlata se encuentra en un momento crucial para definir el rumbo de su temporada. Empezó con la posibilidad de mejorar muchas cosas. La primera salida a la cancha lo evidenció.
La formación de América de Cali
El equipo escarlata jugó con: Jorge Soto; Mateo Castillo (Yerson Candelo), Éder Álvarez Balanta, Brayan Medina, Marcos Mina (Ómar Bertel); Franco Leys, Juan Sánchez (José Cavadía), Sebastián Navarro; Cristian Barrios (Jóider Micolta), Duván Vergara y Pipe Gómez (Yojan Garcés).
Así que el DT Polilla Da Silva usó a 3 de sus fichajes para el 2025 (Mateo Castillo, Ómar Bertel y Sebastián Navarro), a varios juveniles y el regreso de Jóider Micolta. Recibió los dos goles en el segundo tiempo
América de Cali, un equipo sin contundencia
Uno de los aspectos más preocupantes que dejó el partido fue la falta de profundidad y definición en el ataque. A pesar de contar con jugadores de experiencia como Duván Vergara y jóvenes prometedores como Pipe Gómez, no logró generar peligro real frente al arco rival. La ausencia de un delantero con capacidad goleadora es evidente y la directiva debe priorizar esta necesidad si quiere tener un equipo competitivo.
La búsqueda de un goleador de garantías no es solo una prioridad, es una urgencia. Si bien Vergara aporta dinamismo y desequilibrio, su mejor versión no es como goleador. Y depender exclusivamente de su rendimiento puede ser un riesgo a largo plazo. Un referente en el área podría ser la solución para convertir las aproximaciones en goles, algo que el equipo necesita desesperadamente.
El mediocampo escarlata, con potencial pero con mucho por trabajar
El debut de Sebastián Navarro mostró destellos de calidad, pero el mediocampo del América careció de un generador de juego que conectara las líneas y creara oportunidades claras para los delanteros. Aquí es donde el posible fichaje de Juanfer Quintero se convierte en una pieza fundamental. La experiencia, visión de juego y capacidad para ejecutar pases filtrados de Quintero podrían transformar la dinámica ofensiva del equipo.
Sin un jugador creativo, América corre el riesgo de volverse predecible y depender demasiado de jugadas individuales. La llegada de Juan Fernando Quintero no solo aumentaría la calidad del mediocampo, sino que también daría confianza y tranquilidad al equipo en momentos clave de los partidos.
VIDEO: el segundo gol que le hicieron a América de Cali (ESPN)
La defensa y los errores que cuestan caro
Los goles de Melgar, ambos en el segundo tiempo, expusieron las fragilidades defensivas del América, particularmente en el retroceso y la coordinación entre los centrales. Aunque Éder Álvarez Balanta mostró liderazgo, siguen las dudas. Además, jugadores como Brayan Medina y Marcos Mina tendrán que trabajar en su concentración y posicionamiento para evitar errores en los partidos importantes.
La defensa debe encontrar un equilibrio que permita contener ataques rápidos, especialmente en un torneo como la Liga BetPlay, donde muchos equipos apuestan por el contragolpe.
¿Qué le falta al América de Polilla Da Silva?
- Un goleador probado: La falta de efectividad frente al arco rival fue el mayor déficit en este primer amistoso. Encontrar un delantero con capacidad para marcar diferencias es indispensable.
- Un generador de juego: La llegada de Juanfer Quintero podría ser el punto de inflexión para resolver los problemas de creatividad en el mediocampo.
- Mayor cohesión defensiva: Aunque la pretemporada sirve para ajustar, los errores básicos en la zaga deben ser corregidos de inmediato.
El camino que le queda por recorrer a América de Cali
La derrota ante Melgar es un recordatorio de que el América de Cali aún está en construcción. La pretemporada es el momento para cometer errores, pero también para aprender de ellos. Con un mercado de fichajes que aún está abierto, la directiva tiene la oportunidad de reforzar las áreas más débiles y darle a Polilla Da Silva las herramientas necesarias para construir un equipo competitivo.