Llegó la hora de otro partido clave para el cuadro verdolaga con el DT argentino al mando. No es una final pero parece. Hay que ganar sí o sí y por buena diferencia. Con Jorge Almirón ya se falló en intentos anteriores. ¿Este sería el último?
En momentos así la hinchada empieza a manifestarse. Hay malestar con el proceso que ha liderado Jorge Almirón. Eso está claro y se le ha hecho saber. El DT llegó a Atlético Nacional luego de dirigir la final de la Copa Libertadores. La perdió con Lanús y a partir de ahí llegaron los retos como estratega verdolaga. ¡Falló siempre en momentos definitivos!
Es ingrato recordarlo pero deberá servir como ejemplo de algo que a Atlético Nacional no debería volver a pasarle. Jorge Almirón pudo empezar su paso por el club con un título. Había que ganarle en casa a Millonarios para alzarse con la Superliga y se falló. ¡Esa vez hubo derrota! Es algo que difícilmente olvide el hincha verdolaga.
Meses después el panorama era idéntico en la Liga Águila. ¡Hasta menos complejo! Había que empatar con Deportes Tolima para coronarse y también se falló. Hubo derrota en los 90 y también en los penaltis. Son dos golpes en casa que normalmente terminan procesos. No pasó con el de Jorge Almirón.
Él llegó con la Copa Libertadores como objetivo principal. Tenía que ganar lo otro, claro, y más teniéndolo tan a la mano. Eso se le escapó y ahora le queda lo que vino a buscar. ¡No hay de otra, profe! Tras fallar con Lanús, busca revancha. Atlético Nacional se la ofreció y acá se juega todo. Avanzó a octavos de final, jugó la ida y la perdió, ¡con Atlético Tucumán!
Se trata de una Copa en la que el rendimiento no ha sido óptimo. También hay derrotas con Bolívar y Delfín. De todo eso deberá sacudirse en el Atanasio ante Atlético Tucumán. ¡Esa es la prueba principal! Si no la pasa, seguramente él mismo se irá. Acá es el todo por el todo. No hay mañana.
