Arturo Reyes vivió de manera especial el histórico 7-1 de Junior frente al Unión Magdalena. El entrenador quería que se hicieran más goles.
No se sentó en el banco de suplentes en ningún momento. Ni después del segundo, ni después del séptimo. Arturo Reyes se la pasó en la línea técnica gritano, gesticulando y hasta regañando a sus dirigidos, que metieron todos los goles que por ahí no se anotaron en otros partidos y sellaron una de las victorias más abultadas en la historia de la institución y del fútbol colombiano. Fue una noche inolvidable.
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Muchos están sorprendidos por el cambio que le ha imprimido el director técnico samario al elenco barranquillero en este tercer ciclo. La transformación ha sido radical desde que se fue Hernán Darío Gómez y llegó Reyes. Hizo ajustes tácticos, sacó a algunos futbolistas com Didier Moreno y Freddy Hinestroza. Le está dando rodaje a hombres de la casa, que él conoce muy bien.
🆕Es la 1° vez que Junior anota 7 GOLES en el Estadio Metropolitano Roberto Meléndez.
Unicosta ya lo había hecho en 1998, precisamente al Unión Magdalena y con el mismo resultado (7-1) pic.twitter.com/iOy9DP0Q2F
— Data 1924 📊⚽🔴⚪ (@Data1924) September 10, 2023
La abultada victoria se puede explicar desde ahí. Si bien es cierto que Unión tuvo un hombre menos durante casi todo el juego, la contundencia de Junior no se puede desmeritar. También que el cuerpo técnico alentó en todo momento a seguir con intensidad, a no relajarse a pesar de ir goleando. Esa es la forma más bonita de respetar al que está enfrente.
Cuando en rueda de prensa le preguntaron por su actitud y si quería que el equipo anotara más tantos, Reyes fue categórico: «Yo siempre quiero más». Si el líder del barco está con esa ambición entonces se auguran más noches tan bonitas en el Metropolitano. Así fue el momento de la gran respuesta:
