Locura de 45 minutos en el estadio Hernán Ramírez Villegas. América de Cali hizo un par de golazos con participaciones clave de Adrián Ramos, y también sufrió en su arco. ¿No hubo un fuera de lugar?
Sobre los 22 minutos, gracias a una muy buena aparición de Jáder Quiñones en el juego, todo era alegría para el cuadro escarlata. Empezó la acción casi que desde la mitad del campo por el costado izquierdo. Allí estaba recibiendo un pase. Conducción, amague para engañar a un rival y pase al centro del campo juntándose con Adrián Ramos, velocidad para ir al espacio y ser habilitado por él. ¡Tremendo! Definió a placer ante la salida del arquero Aldair Quintana.
La remontada del Pereira
Luego del 0-1, todo favoreció al Pereira en el partido. Sorpresivo. Llegó al 1-1 en una acción polémica. ¿No era fuera de lugar? El zaguero Diego Hernández se encargó de anotar en una jugada que parecía debía ser invalidada. Hubo revisión en el VAR y la determinación de darlo como gol válido. Así que pasó a ser el 1-1 a los 33 minutos.
✅ HABILITADO: Buen trabajo de Jhon Perdomo y Jenny Arias en sala VOR. Poco más de dos minutos se tardaron en trazar las líneas y en mostrar que Hernández del Pereira se encontraba en posición legal cuando sale el pase del compañero #LaLigaxWIN pic.twitter.com/etHabwDzzx
— El VAR Central (Andrés) (@ElVarCentral) October 1, 2023
Con ese resultado, tiempo por delante y el envión anímico del tanto, el local fue por más y terminó dándole vuelta al resultado. Volvió a marcar a los 42, ahora en una acción de tiro libre. Yeison Suárez se hizo cargo del cobro, envió el balón a la barrera y en el rebote anotó con otro remate cruzado, imposible para el arquero Jorge Soto.
¡Y otro golazo para responder!
Sobre los últimos minutos del primer tiempo, luego de recibir el empate, el equipo de Lucas González volvió a basarse en el juego colectivo para hacer daño. Ahora cambió de lado. Lo hizo por derecha con Cristian Barrios. Se juntó con Adrián Ramos. ¡Bendito fútbol colectivo! De nuevo la pared surtiendo efecto, ahora para dejar al capitán solo frente al arco. Ahí no falló, claro.
