Tener una moneda valiosa puede ofrecerte la oportunidad de ganar una buena suma de dinero. Y es que los amantes de la numismática estudian, buscan y hacen todo lo posible por conseguir aquella pieza que les llama la atención por algún motivo. Esto tiene una parte buena y otra menos buena. En el lado positivo está la posibilidad que todos tenemos de tener una moneda valiosa, y en el negativo, que hay tantas, que dar con la buena puede ser una ardua tarea.
Sin embargo, a poco que indagues en casas de pujas y páginas especializadas, puedes encontrar una amplia variedad de piezas con un valor muy superior al que tienen o tenían como forma de pago. Cabe recordar, que puede ponerse en valor tanto una moneda actual, como una que esté ya fuera de circulación como divisa oficial. En cualquier caso, lo mejor es que busques entre tu cajones, pues por la pieza que te mostramos a continuación, pagan una buena cantidad de dinero.
Hasta $40,000 pueden darte por esta moneda
Imagina todo lo que puedes hacer con $40,000… Y, ¿Lo mejor? Solo a cambio de una moneda. El mundo de la numismática está lleno de joyas que pueden pasar desapercibidas, sin embargo, algunas tienen un coste de mercado mayor a cualquier obra de arte o piedra preciosa. Lo importante en estos casos, es aprender a distinguirlas. En este sentido, puedes empezar por el primer paso: Busca, reúne y agrupa todas las monedas que tengas en casa y estudia su valor.
Sin embargo, seguro que la que ansías es por la que pagan $40,000. Pero, ¿Qué tipo de moneda es? Se trata del Flying Eagle Cent de 1858, en su versión de ‘letras grandes’. Una pieza que es valiosa por dos razones. En primer lugar, por su estructura. Se trata de una moneda que reconocerás porque tiene diseñada un águila en pleno vuelo en el anverso y la denominación en el reverso. Además, es de gran tamaño y pesada, pues mide 19 mm y está compuesta por un 88% de cobre y un 12% de níquel.
Estas características hicieron que fuesen poco prácticas en su época. Pues tanto peso y tamaño, al final la convierte en una pieza incómoda de transportar y que se tiende a rechazar. No obstante, era un fallo habitual, pues en muchos casos, las autoridades de la época incidían en querer monedas grandes, con materiales pesados y grandes diseños, que luego, no eran prácticas. Sin embargo, hay otra razón por la que es tan valiosa.
Un error en numismática siempre suma
Esta moneda Flying Eagle Cent de 1858, en su versión de ‘letras grandes’, es voluminosa y podría destacar solo por su estética, pero, ¿Tanto como para costar $40,000? El tiempo ha demostrado que no. Y es que hay otra característica que revaloriza exponencialmente a esta pieza: Un error de acuñación. Y sí, en el mundo de la numismática los «errores se pagan caro», pero en el buen sentido de la frase, porque cualquier fallo puede hacer de una pieza que sea única.
En este caso, el error solo es reconocible si la moneda está en buen estado de conservación. De ser así, el Servicio Profesional de Calificación de Monedas (PCGS, por sus siglas en inglés) señala un error muy específico. Para visualizarlo, hay que fijarse en el lugar donde pone la palabra ‘AMÉRICA’, en la que las letras ‘A’ y ‘M’ aparecen unidas en la base. Este error es fundamental para que el valor de la pieza alcance los $40,000.
El estado de conservación de la moneda es fundamental para que mantenga su valor e incluso aumente. Del mismo modo, un error de acuñación casi siempre la hace más valiosa. Cabe recordar, que desde este medio llevamos a cabo una labor meramente informativa y en ningún caso nos dedicamos a la compraventa de monedas.
