El equipo azul se quejó formalmente por el mal desempeño del árbitro Bismarks Santiago en el compromiso contra el América de Cali por la primera fecha en los cuadrangulares semifinales.
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Fue una reacción pronta de la dirigencia, en busca de sentar su voz de protesta por el manejo del juez en ese compromiso, que aunque fue ganado por Millonarios dejó consecuencias disciplinarias: 2 expulsados, 8 amonestados y la sanción de un penalti, que a juicio del cuadro azul, resultó inexistente.
Además, el club adujo en su carta que fueron demasiadas interrupciones en el juego, entre otros detalles. Dejó constancia de ello, esperando soluciones o una respuesta.
Desde la Comisión Arbitral ya hubo una respuesta para el equipo capitalino. En conclusión: Le dieron la razón a Millonarios. “El árbitro mostró dificultad en el control del juego, la apreciación y valoración de las entradas”, dice un aparte de la respuesta entregada al cuadro bogotano.
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“Apreciamos que no hubo uniformidad y consistencia en las mismas, ya que dio trámite normal a unas acciones y en otras las castigó severamente”, dice otro fragmento de la carta. En cuanto al árbitro, aseguran que se implementó un plan de trabajo con el árbitro, “en busca de mejorar y poder garantizar la correcta aplicación de las reglas de juego”.
