Juanfer Quintero está a punto de protagonizar uno de los movimientos más peculiares del mercado de fichajes en Sudamérica. Su regreso a River Plate, club donde alcanzó la gloria en 2018 con la Libertadores, parece cuestión de horas. Pero lo que más llama la atención no es el destino, sino la forma en la que se daría su salida de América de Cali, el equipo que lo trajo de vuelta al fútbol colombiano.
Con un contrato alto y una supuesta deuda acumulada por parte del club americano, la situación entre Quintero y América parecía compleja. Sin embargo, el futbolista habría encontrado una vía poco convencional para resolverla y dar el paso que tanto deseaba: volver a vestir la camiseta de la Banda. Una jugada que involucra perdón de deuda, un préstamo poco común y una compensación económica que correrá por cuenta de River.
La deuda que se convertiría en oportunidad para América de Cali y Juanfer Quintero
La versión más detallada del movimiento la entregó el periodista argentino César Luis Merlo. Según explicó, Juanfer Quintero tomó la decisión de perdonar la deuda que América de Cali tenía con él. A cambio, River Plate, su próximo destino, le compensaría directamente ese dinero como parte de su nuevo contrato. Es decir, el club argentino no le pagará nada a América por el pase, pero sí le dará al jugador un monto adicional por el esfuerzo que hizo para salir.
“Juanfer perdona la deuda con América de Cali y ese dinero lo termina poniendo River en su contrato. River no le paga a América y sí le paga un extra al jugador. El amigo Tulio se saca de encima un contrato alto, que era algo que necesitaba”, afirmó Merlo. Así, el volante quedaría libre y podría firmar un préstamo directamente con River, sin intermediación de clubes.
Un préstamo entre jugador y club: fórmula de River para fichar a Juan Fernando Quintero
La figura bajo la cual Quintero llegaría a River es igualmente llamativa: sería un préstamo por 18 meses, con posibilidad de extensión, pero pactado directamente entre el jugador y el club. Al quedar libre por falta de pago y haber perdonado la deuda, Juanfer tiene la potestad de negociar su nuevo vínculo sin necesidad de pasar por una transferencia tradicional.
Este tipo de acuerdos son poco comunes, pero legales y válidos dentro del marco reglamentario. En este caso, resuelve una situación delicada para América, que no podía sostener el salario del jugador, y al mismo tiempo le permite a River incorporar a una figura de renombre sin tener que pagar por sus derechos deportivos. Una jugada pensada desde lo emocional, lo contractual y lo económico.
El deseo de volver con Gallardo al mando
El retorno de Marcelo Gallardo al banquillo de River también fue clave para destrabar el deseo de Quintero. La relación entre ambos es estrecha, construida durante la etapa más gloriosa de la historia reciente del club argentino. Juanfer no solo quiere volver a jugar en River, sino hacerlo bajo la conducción del técnico que lo potenció y confió en él en los momentos clave.
Ya se había hablado de un acuerdo entre el jugador y el club desde hace semanas, pero la resolución de su contrato con América de Cali fue el paso que faltaba. Con todo encaminado, Quintero prepara su tercera etapa en el equipo de Núñez, mientras desde las oficinas del Monumental se ultiman los detalles de su presentación oficial.
América de Cali libera un cupo, pero no genera ingresos
Para América de Cali, la salida de Juanfer significa más un alivio que una pérdida. Aunque no recibiría dinero por su partida, el club se libera de uno de los contratos más altos de su plantilla. En un momento económico complejo, el club necesitaba reducir cargas salariales y reestructurar su plantilla. A eso apuntaría para el 2025-2 en el que competirá en Liga BetPlay y Conmebol Sudamericana.
Lo que parecía una relación de largo aliento terminó siendo un paso breve pero mediático. La ilusión de ver a Quintero brillando con la camiseta escarlata se apagó antes de consolidarse. Ahora, América deberá enfocar sus esfuerzos en consolidar un proyecto más sostenible, mientras River celebra el retorno de un ídolo que vuelve por decisión propia y con una fórmula que muy pocos hubieran imaginado.