Las curiosidades del clásico paisa


El partido más importante y más jugado en la ‘Bella Villa’ ha dejado muchas historias y curiosidades. Hoy, en la antesala de un clásico más, les dejamos este compilado de episodios inolvidables.

El hipódromo

EL 15 de agosto de 1.948 se jugó el primer partido del fútbol profesional colombiano en un estadio que no era estadio. Se trata del Hipódromo de San Fernando en Itagüí. Donde hoy funciona La Mayorista,

Los partidos se jugaban en la mañana porque en la tarde eran las carreras de caballos. La cancha estaba después de las gradas y la pista.

Allí se jugó el primer clásico, fue un 12 de septiembre del mismo año, el resultado fue un contundente 3 a 0 para el Poderoso. En los inicios del fútbol profesional colombiano el equipo grande era el Poderoso.

El partido sin rival que nunca existió

El 23 de julio de 1950 se presentó una de las historias más curiosas en el clásico. Medellín no asistió al partido por un problema con los propietarios del hipódromo de Itagüí por los aumentos excesivos de dinero en el alquiler del sitio.

Nacional si se presentó a la cancha, por lo cual el inglés Stanley James Isom -árbitro del partido- decidió comenzar al compromiso.

El juez ordenó el saque y el delantero Verdolaga Jaime ‘Pildorita’ Cardona remató al arco vacío anotando el gol de la victoria. El árbitro firmó las planillas legalizando el partido.

Días después, el presidente del DIM, Don Alejandro Cano, realizó una reclamación ante los entes reguladores del fútbol y al final la victoria no fue para Nacional.

Los goles de René

El ‘loco’ fue uno de tantos jugadores que vistieron las dos camisetas. René tiene un récord casi imposible de igualar o superar. Higuita anotó dos goles de tiro libre con cada una de las dos camisetas. Cuatro goles de tiro libre en total.

Uno de esos goles lo marcó René en un clásico. Fue el 18 de junio de 1.999, Higuita anotó en el 1 a 1 entre el Rojo y el Verde vistiendo la camiseta del Poderoso. La víctima fue Miguel Calero Q.E.P.D.

Lo que pudo ser y no fue

Después de la Copa América 2.001 Mauricio ‘Mao’ Molina ya estaba listo para llegar a Atlético Nacional. El negocio entre Gustavo Upegui y el Presidente de Nacional estaba cerrado.

Un día antes de la llegada de ‘Mao’ al Verde alguien importante de la Junta de Nacional levantó la voz y dijo que ese negocio no se podía hacer por una pubálgia que sufría Molina.

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El negocio se deshizo. Don Javier Velásquez, Presidente del Medellín llamo a Gustavo Upegui y a Mao, les dijo que él lo esperaba a que se recuperara.

Mao dijo que si, y el resto es historia. Hasta gol olímpico tuvo que sufrir Nacional a manos de Mauricio Molina.

Sol y sombra para el Poderoso

Los dos momentos más icónicos de la historia del DIM fueron en clásicos. Uno fue muy triste, el famoso título de cinco minutos que Junior le arrebató al Rojo.

El otro fue el más grande, el título del 27 de junio del 2.004.

 

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