La Premier League implementará una supervisión exhaustiva sobre los traspasos de jugadores para garantizar el cumplimiento del ‘fair play’ financiero, recientemente aprobado en su Asamblea General Anual en Londres. “La liga revisará todas las transferencias para verificar que se realizan de buena fe”, según reportó el Daily Mail.
Casos recientes, como los fichajes del Aston Villa por Tim Iroegbunam y Lewis Dobbin, han hecho que la Premier ponga el foco en estas operaciones. Aunque estas transferencias no han violado ninguna regla escrita, han aprovechado vacíos legales, lo que ha llevado a la liga a intensificar su supervisión.
El objetivo principal de esta iniciativa es mejorar y preservar la sostenibilidad financiera de los clubes y mantener un equilibrio competitivo en la liga. La introducción de las reglas Squad Cost Rules (SCR) y Top-to-Bottom Anchoring Rules (TBA) limitan el gasto de los clubes para evitar que se desvíen de los ingresos más bajos de la liga.
Estas medidas también pretenden evitar que los clubes gasten más de lo que ingresan, lo cual podría llevarlos a situaciones financieras insostenibles. El aumento en la vigilancia de las transferencias busca asegurar que todos los clubes compitan en igualdad de condiciones.
La Premier League se ha enfrentado a críticas por el creciente costo de las transferencias y los salarios, lo que ha generado preocupación sobre la viabilidad a largo plazo de los clubes más pequeños. Con esta nueva regulación, se espera que la liga pueda mantener un ambiente competitivo y financieramente saludable.
Los clubes han reducido significativamente sus fichajes en comparación con temporadas anteriores. En la temporada pasada, la Premier League invirtió 954 millones de euros en fichajes, con el Chelsea liderando la inversión con 300 millones de euros en jugadores como Mykhailo Mudryk y Enzo Fernández. Ahora, con las nuevas reglas, se espera una gestión más prudente y controlada de los recursos financieros.
Además, la Premier League también ha introducido sanciones más estrictas para los clubes que no cumplan con las nuevas regulaciones. Estas sanciones pueden incluir multas significativas, deducción de puntos e incluso la prohibición de fichajes durante futuras ventanas de transferencia.