Bryan Rovira lo había advertido. Durante la rueda de prensa previa al viaje de Atlético Nacional a Paraguay se mostró complacido por el reto que iban a enfrentar. “Estamos muy preparados, ansiosos, con muchos deseos, con muchas ganas y sobre todo con mucha ilusión. Yo creo que esto lo estábamos esperando y las expectativas son demasiadas”, dijo antes de desplazarse a Asunción.
Y es que su presencia en el Verde se ha convertido en necesaria. La variación está en su compañía, pero esa zona de contención en suya. Al igual que la banda de capitán cuando no está Jéfferson Duque y en el estadio Defensores del Chaco así fue. Y el duelo de ida contra Guaraní representó la cuarta vez en que el volante recibió la cinta.
Sin embargo, más allá de lo simbólico, el futbolista de 24 años ha demostrado tener liderazgo y manejar los hilos del Rey de Copas en el mediocampo. Ante los los paraguayos no fue la excepción, consiguiendo un partido impecable, que al final le entregó un premio que hace rato venía reclamando: un gol.
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El cesarense se apuntó su anotación número cuatro en 89 juegos disputados con el Verdolaga. No marcaba desde el 18 de octubre de 2020, en el empate por 2-2 frente a América de Cali, en el estadio Atanasio Girardot. Adicionalmente, Rovira rompió con varias cifras, pues el equipo antioqueño no conseguía un tanto de tiro libre desde el 26 de mayo de 2019, por intermedio de Daniel Bocanegra, en el juego en el que se impusieron por 0-1 al Deportivo Cali, en Palmaseca.
El centrocampista espera seguir siendo protagonistas y tendrá la oportunidad de consolidarse como un baluarte del plantel de Alexandre Guimarães, este domingo que reciban al Junior FC, por la jornada 12 de la Liga BetPlay 2021-I a las 8:00 p.m.
