La victoria sobre Bolivia 3 – 0 le permite a la Selección Colombia mantenerse en carrera por el sueño de ir al Mundial.
Un “sí se puede” bajando desde las gradas, ceños fruncidos, máxima concentración. Entonar el himno con orgullo. Colombia entró al campo enfocada en la misión de vencer a Bolivia como sea. Jugar bien, bonito, feo… ganar. Las formas después, los hechos ahora.
Así salió el equipo. Corajudo, furioso. Bloque alto, presión constante, con James de constructor y Luis Díaz siendo la referencia más importante en el ataque. Ganar desde el primer tiempo como el mejor paliativo a la presión de esta jornada.
De las buenas intenciones a los hechos. El 0 – 0 pasados 20 minutos se explica en una Colombia dominante hasta el último cuarto del campo, donde Bolivia se hizo fuerte. Impenetrable el fortín rival, el desespero tomó asiento en el estadio barranquillero.
Sin embargo, a diferencia de lo sucedido contra Perú o Ecuador, la Selección tuvo en Luis Díaz a ese jugador inspirado, con el fuego sagrado para ser el portador de la primera alegría. Rompió el hechizo. Después de 7 partidos y 38 minutos volvió el gol a Colombia.
Respirar profundo. Colombia ya tenía la ventaja, con bastante tiempo por delante para seguir de largo. Había que marcar más, recuperar la confianza de cara a la última fecha. Además, no se puede pasar por alto la importancia del gol diferencia en esta definición de las clasificatorias.
Los resultados en los demás partidos, culminado el primer tiempo, decían que Colombia solo podía aspirar a luchar por la repesca, pugna en la cual se encuentra involucrado Perú y hasta cierto punto, Chile.
Por eso la importancia de ir por más goles, sin encajar alguno. Aumentar la ventaja le daría a Colombia una especie de ahorro, en caso de alguna situación extrema. ¡Era necesario!
A eso le apostó la Tricolor en adelante. Rueda refrescó el ataque con Borja y Quintero (se fueron Muriel y Sinisterra). Con un “jugón” del corte de Juanfer la esperanza de aumentar la diferencia en favor de Colombia aumentó.
Satisfacción inmediata porque Miguel Borja, tras asistencia de Luis Díaz, puso el 2 – 0. Merecido, justo. Colombia tenía aun tiempo de sobra para ir por un tanto más y sobre el final Matheus Uribe, de cabeza en una especie de borbollón, selló la goleada. A pensar en Venezuela y prender las velas porque solo resta una oportunidad para Colombia: Luchar por el paso a la repesca.
🎥 Revive el gol de @MiguelABorja9 para el 2-0 parcial
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— Selección Colombia (@FCFSeleccionCol) March 25, 2022
