El delantero del América de Cali vivió otros seis meses al mismo estilo de lo que ha sido toda su carrera profesional. Así le fue en su regreso a Colombia.
Uno de los fichajes más polémicos del América de Cali en el más reciente mercado de fichajes, fue el del delantero Joao Rodríguez, quien fue una gran promesa en sus primeros años en el fútbol, pero con el pasar del tiempo se dilucidó y terminó en un jugador más del montón que tuvo un paso por el Chelsea. Sin embargo, a pesar de su mala trayectoria, acabó en el bicampeón del FPC.
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El jugador se destacó en las inferiores de la Selección Colombia y fue comprado por el Chelsea, pero fue prestado a varios equipos buscando su consolidación. Uniautónoma, Bastia, Sint – Truden, Santa Fe, Cortuluá, Tampico Madero y Tenerife. Duró 6 meses en cada uno de esos equipos hasta que cumplió 23 años y le pudieron entregar sus derechos deportivos, entonces añadió Central Córdoba y Necaxa a su historial, cada uno también con 6 meses, hasta que ahora le abrieron las puertas en América.
Recientemente cumplió 25 años, jugando para el club el cual se declaró hincha, donde sumó apenas 39 minutos entre Liga BetPlay y Copa Libertadores, distribuidos en 5 partidos, y lo más destacado que tuvo fue una acción de penal ante Millonarios la cual no le cobraron, por lo que su aporte en estos meses que estuvo en América fue totalmente nulo.
Así, con estas pobres estadísticas ha sido el trasegar de su carrera en los diferentes equipos donde ha estado, recalcando que ya lleva 10 clubes en tan corta vida profesional. Seguramente su agente ya le esté buscando un nuevo destino, pues aunque tiene contrato hasta diciembre, es muy poco probable que se quede. Al final, lo esperado: mala movida en el mercado para América.
