Sigue haciendo de las suyas la ayuda tecnológica con el Junior de Barranquilla. El VAR le dio un penalti, y… ¿le quitó otro?
Controversia servida. El hincha juniorista debe estar molesto, máxime si los antecedentes inmediatos en ese sentido no son los mejores. Viene de ser eliminado en la Liga BetPlay con acciones discutidas por cuenta del videoarbitraje.
Aquí, en territorio chileno y frente al Coquimbo, el primer gol del Junior de Barranquilla fue de penalti. El VAR dio la razón al determinar una infracción del arquero local sobre Edwuin Cetré.
Miguel Borja cobró con suficiencia, decretando el 0 – 1. Ventaja para Junior, pero no basta porque en ese momento, así el marcador global esté 2 – 2, Coquimbo Unido hizo 2 goles de visitante y ese detalle pesa para efectos de dirimir el clasificado a las semifinales de la Copa Sudamericana 2020.
La mala del VAR con el Junior
Acto seguido, una nueva incursión ofensiva del Junior parecía mano en el área por parte de un jugador al servicio del club chileno. Miguel Borja la reclamó a rabiar, pero en el VAR la decisión fue diferente, pese a la claridad que para muchos decidía esa acción.
Pudo ser un nuevo penalti, oportunidad inmejorable para que el Tiburón marcase ese gol visitante que tano requiere en su afán por conseguir el ansiado tiquete a las semifinales de la Copa Sudamericana.
