Hubo bastante molestia con el DT por lo que pasó con el cuadro verdolaga en todo el 2018. Ya no está y las cosas no mejoran. Está claro que también hay un grave problema con buena parte de los jugadores de Atlético Nacional.
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Hay una cuestión de actitud y de nómina. Ante Atlético Bucaramanga, por ejemplo, no estuvo Jorman Campuzano y se notaron las dos cosas. El hoy en día jugador de la Selección Colombia es el mejor jugador de Atlético Nacional en el año. Es el que tiene todo lo que a los demás les hace falta.
Sin él, faltó fuerza en la mitad de la cancha. Tampoco hubo voz de mando ni recuperación para poder hacer daño. Atlético Nacional tuvo el balón, sí, pero no lo sabe usar. No está siendo efectivo, más allá de los dos goles que le hizo al cuadro bumangués. Con todo lo que superó al rival en ese ítem (casi 70% contra 30%), es difícil entender que le cueste anotar.
A Jorge Almirón se le criticaron muchas cosas. Su proceso terminó antes de tiempo por resultados pero también por las varias falencias que se veían en cancha. Ahora no está él. Quedó Hernán Darío Herrera pero nada cambió. Es cierto, pasó poco tiempo pero… ¿en serio los jugadores siguen igual?
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No hubo una sacudida a la crisis. ¡Es que Atlético Nacional todavía no ganó nada en 2018 y es el mejor equipo del país! La apuesta para lo que queda del año es la Liga Águila y ahora se sumó solo 1 punto de 6. Difícil. Jorge Almirón debía irse. Él mismo así lo entendió. Pero, la verdad, no es el único que deja la sensación de no cumplir la expectativa.
