Según lo publicado por Poder360, el Ministerio de Finanzas de Brasil tomó una decisión que promete transformar el escenario de las apuestas deportivas online en el país.
Anunciada el jueves, la nueva regulación prohíbe el uso de tarjetas de crédito, comprobantes bancarios, efectivo, cheques, criptoactivos, pagos de terceros y cualquier medio de pospago para las apuestas deportivas en línea. A partir de ahora sólo se aceptarán Pix y tarjetas de débito como métodos de pago válidos.
El principal objetivo de esta medida es aumentar la seguridad y transparencia en las transacciones financieras del sector, además de combatir el lavado de dinero y la financiación de actividades ilícitas.
El Ministerio de Hacienda ha publicado un plan detallado para regular las apuestas deportivas online, dividido en varias fases, cada una de las cuales aborda diferentes aspectos del sector.
En la primera fase, prevista hasta abril, se establecen las bases esenciales para el funcionamiento de las empresas de apuestas. Esto incluye habilitar laboratorios de certificación, definir reglas para los métodos de pago, estipular requisitos técnicos y de seguridad para los sistemas de apuestas y definir los criterios para solicitar autorización para operar en el mercado.
La segunda fase, hasta mayo, se centra en cuestiones relacionadas con la seguridad y los derechos de los apostadores. Se describen medidas para combatir el blanqueo de dinero, la financiación del terrorismo y otras formas de fraude en el mercado de las apuestas. Además, se establecen las normas legales y los derechos de los apostadores.
En la tercera fase, hasta junio, se implementan medidas regulatorias y de inspección específicas, incluida la definición de requisitos técnicos y de seguridad para los juegos de azar en línea, reglas para el seguimiento de las actividades del sector y procedimientos para la aplicación de sanciones administrativas en caso de infracciones.
En la última fase, hasta julio, se abordan cuestiones relacionadas con el juego responsable y el impacto social de las apuestas. Se estipulan medidas para promover un entorno de juego más saludable, prevenir el juego patológico y destinar los recursos recaudados de las apuestas a fines sociales.
