José Robson de Oliveira no solamente tuvo la oportunidad de conocer a su gran ídolo del fútbol. Su vida cambió para siempre ese día, gracias a Lionel Messi.
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“Ronaldinho”, le llaman y él corresponde al saludo. Es costumbre. Asumir la condición de doble del crack brasilero es lo que le permitió salir adelante y todo esto se lo debe a Messi. Nunca olvidará aquel día del Mundial Brasil 2014, cuando burló al personal de seguridad en un entrenamiento de la Selección Argentina en Belo Horizonte. Uno de sus contertulios llegó hasta Lio y le besó los pies. Él alcanzó a estrechar su mano y como un chispazo de felicidad, en Messi brotó una genuina risa.
El crack argentino reconoció en el seguidor a su amigo Ronaldinho. ¡Es que en verdad son idénticos! Ese día, la prensa internacional habló del clon de Dinho que saludó a Messi. Y más de uno quedó con la misma cara de asombro del Ronaldinho original cuando conoció a su clon, con quien luego trabajaría en varios eventos, shows y hasta comerciales. Robson se transformó en el doble oficial de un crack al cual admira bastante, pero no tanto como a Lionel.
“Messi representa mucho para mí. No soy Ronaldinho, soy simplemente Robson. Soy fanático de él también, pero Leo es inexplicable”.
“Ese día fue un quiebre. Muchas cosas me acontecieron después de esa foto. Mi vida cambió. Por Messi me pude comprar una casa, porque me contrataron para películas, para eventos, para un montón de cosas”, comentó en una entrevista para el diario Olé.
Trabajar con Ronaldinho le dio una estabilidad que agradece. Pero si hay algo que quisiera más que nada en el mundo es ser amigo de su máximo ídolo.
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