La victoria de América sobre Deportes Tolima revivió las posibilidades de clasificación a la final y dejó un mensaje profundo de uno de sus referentes, Adrián Ramos.
El ídolo escarlata, autor de dos de los goles del triunfo, agradeció el apoyo de los hinchas que asistieron al estadio, pero también extendió un llamado reflexivo a quienes, desilusionados, optaron por no acompañar al equipo en este momento crucial. Sus palabras fueron un recordatorio de la importancia de la unión en los momentos más adversos.
🏅 Las palabras de nuestro capi, figura de esta gran victoria en el Pascual 🫡#TodosUnidos pic.twitter.com/U27VvNU2ep
— América de Cali (@AmericadeCali) December 1, 2024
Adrián Ramos y el papel de la hinchada como el «jugador número 12»
Dijo que su presencia se sintió en el respaldo incondicional desde las gradas. Pero también fue directo al señalar la ausencia de quienes, quizás frustrados por los resultados previos, no acudieron al llamado del equipo. «Si nos vamos a hundir, nos hundimos todos. Y si vamos a ir para adelante, vamos todos juntos», dijo subrayando la necesidad de remar en la misma dirección, especialmente en una instancia tan determinante como los cuadrangulares. Este llamado a la unidad resuena no solo en lo deportivo, sino en el espíritu de la institución.
El triunfo ante Tolima fue un renacer para América. Después de 3 fechas sin ganar, el equipo necesitaba esta victoria para mantener viva la esperanza de clasificar a la final. Ramos, quien con su experiencia y liderazgo se convierte en un pilar dentro y fuera de la cancha, demostró que no basta con los goles para revertir la situación. Se necesita compromiso, determinación y, sobre todo, el respaldo de todos los actores que conforman el universo escarlata: jugadores, cuerpo técnico, directivos e hinchas.
Las palabras de Adriancho son un reflejo del espíritu de lucha que caracteriza al América de Cali. Esta victoria no garantiza nada, pero deja una enseñanza valiosa: en los momentos más difíciles, la unidad es el mayor aliado. La invitación está hecha: abrazar la causa, acompañar al equipo y creer en la capacidad de sobreponerse a la adversidad. Los dos partidos restantes serán una prueba no solo de fútbol, sino de cohesión, y América tiene en su capitán una guía que sabe que las verdaderas victorias empiezan desde la unión de todos.
