El Real Madrid dio un paso importante en los octavos de final de la Champions League al vencer 2-1 al Atlético de Madrid en el Santiago Bernabéu. Sin embargo, el equipo de Carlo Ancelotti sufrió más de lo esperado y ahora debe preparar un partido de vuelta que promete ser aún más exigente. A una semana del choque definitivo en el Estadio Metropolitano, el técnico italiano enfrenta varios dilemas para conformar su once ideal.
Una victoria sufrida del Real Madrid que deja varios interrogantes
El duelo de ida dejó en evidencia las dificultades del Real Madrid para imponer su ritmo. A pesar de contar con una plantilla de gran calidad, el equipo merengue nunca logró sentirse cómodo en el partido, especialmente después de los primeros 20 minutos.
«Son partidos igualados. Nos enfrentamos a un equipo de máximo nivel en Europa y no puedes pensar en acabar aquí la eliminatoria. Hemos tomado una pequeña ventaja, pero será complicado en la vuelta», analizó Carlo Ancelotti tras el encuentro.
Federico Valverde al límite físico: ¿descanso obligado?
Uno de los principales dolores de cabeza para Ancelotti es el estado físico de Federico Valverde. El uruguayo jugó 82 minutos ante el Atlético de Madrid, pero las alarmas siguen encendidas por la lesión que arrastra en la pierna izquierda desde el partido contra Osasuna. Ancelotti ya lo forzó en el ‘play-off’ de Champions ante el Manchester City, lo que agravó su problema y lo obligó a parar durante varios encuentros.
El técnico lo necesita, ya que ha encontrado en Valverde una solución improvisada para el lateral derecho ante la ausencia prolongada de Dani Carvajal y la fragilidad de Lucas Vázquez. Sin embargo, la prioridad es que llegue en las mejores condiciones al partido de vuelta, por lo que todo apunta a que descansará en el compromiso de Liga ante el Rayo Vallecano.
Ancelotti tendrá que recomponer nuevamente el mediocampo
La baja de Dani Ceballos por dos meses ha complicado aún más el panorama en la medular del Real Madrid. Sin el andaluz, Ancelotti ha tenido que recurrir al veterano Luka Modric para darle más claridad al equipo. Sin embargo, el croata ya no tiene el despliegue de antes, lo que afecta el equilibrio en el centro del campo.
Además, Eduardo Camavinga no estuvo a la altura ante el Atlético, mientras que Aurélien Tchouaméni es más un mediocentro posicional que un generador de juego. Todo esto deja en una situación comprometida al Madrid, que perdería aún más solidez sin Valverde en el centro del campo.
El juego de vuelta en el Metropolitano plantea varios desafíos
Con el partido de ida ya en el pasado, Carlo Ancelotti deberá encontrar la fórmula para enfrentar un Atlético de Madrid que, como él mismo anticipa, saldrá con mayor intensidad en la vuelta.
«Si este partido fue difícil, imaginen el del próximo miércoles (ríe). Hemos logrado una pequeña ventaja, pero la vuelta será complicada. El Atleti apretará más y será igualado. La calidad de ambos equipos es muy alta», reconoció el entrenador.
El historial en eliminatorias de UEFA es claro: cuando el Real Madrid gana por un gol en casa en la ida, suele sufrir en la vuelta. El Metropolitano es un escenario complicado, y el equipo rojiblanco lleva casi tres años sin perder allí en competiciones europeas.