Si te jubilaste a los 62 años y recibes pagos mensuales del Seguro Social, debes saber que el próximo depósito está confirmado para el 20 de julio. El monto máximo que puedes recibir es de $2,831, pero la mayoría de beneficiarios recibe una cantidad promedio inferior, dependiendo de sus aportes y tiempo trabajado.
Este pago corresponde a quienes tienen fecha de nacimiento entre el 11 y el 20 de cualquier mes y que comenzaron a recibir su beneficio después de mayo de 1997. El depósito se hará automáticamente en la cuenta bancaria o tarjeta Direct Express que tengas registrada con la SSA.
El cheque máximo de jubilación solo se alcanza con historial laboral completo
El pago máximo de $2,831 aplica únicamente a personas que cotizaron de forma continua y con ingresos altos durante al menos 35 años antes de solicitar su jubilación a los 62 años. La cantidad exacta que recibirás puede ser menor si tu salario promedio fue bajo o si no alcanzaste los 35 años de trabajo exigidos para el cálculo completo del beneficio.
Jubilarte antes de la llamada «edad plena de jubilación» (que es 67 años para nacidos en 1960 o después) implica una reducción significativa en el cheque mensual. Esta reducción suele rondar el 30 % respecto al pago que recibirías si esperas a los 67, y es aún mayor comparado con quienes retrasan su jubilación hasta los 70 años, donde el pago puede llegar hasta los $5,108.
Para saber tu cantidad exacta puedes revisar tu cuenta personal en my Social Security, donde ya aparece actualizado el monto de julio. Allí también puedes ver si hay deducciones como las primas de Medicare que podrían afectar tu importe neto.
Cómo impacta el retraso de jubilación en tus futuros pagos
Si bien este pago de $2,831 es el máximo posible para quienes se jubilan a los 62 años, muchos beneficiarios se preguntan cómo habría cambiado su situación si hubieran decidido retrasar su jubilación. La diferencia es significativa: por cada año que postergas tu retiro después de la edad mínima, tu cheque mensual aumenta alrededor de un 8 % anual hasta los 70 años.
Esto significa que quienes esperan más para solicitar su beneficio pueden terminar cobrando casi el doble en comparación con quienes lo solicitan temprano. Esta información es clave para personas más jóvenes que están evaluando cuándo jubilarse: entender el impacto financiero a largo plazo de decidir entre jubilarse temprano o esperar más tiempo puede ayudarte a planificar de forma más sólida tu futuro.
Por eso es útil revisar tu historial laboral, tus aportes acumulados y hacer simulaciones en my Social Security, donde podrás comparar cuál sería tu beneficio mensual en diferentes escenarios de edad. Además, estar informado de estos cálculos permite que puedas anticipar cómo variará tu pago en función de la edad a la que accedas al programa y de tus ingresos a lo largo de la vida laboral.