Desde principios de este año, algo ha cambiado para millones de jubilados en Estados Unidos. No es una promesa. Es una ley. Y ya está en marcha. Se aprobó en enero, aunque sus efectos se notan poco a poco. Hablamos de la Ley de Equidad en el Seguro Social. Y, como su nombre sugiere, viene a corregir una injusticia que llevaba años arrastrándose.
Sobre todo para quienes trabajaron en el sector público: maestros, policías, personal sanitario, funcionarios estatales… gente que cotizó durante años, pero que veía reducida su pensión solo por haber trabajado en empleos no cubiertos del todo por el sistema federal.
por qué había tanta queja con esto
Algunos jubilados cobran más desde hace poco en Estados Unidos
El problema venía de dos normas, con nombres poco amigables: WEP y GPO. No hace falta memorizar siglas. Basta con saber que esas reglas reducían lo que se cobraba del Seguro Social si, por ejemplo, habías tenido una pensión estatal por un lado y también habías cotizado por otro. Te descontaban. Como si tener dos ingresos fuera algo malo.
Y claro, eso no encajaba con muchos jubilados, que veían cómo lo que habían ganado con esfuerzo se recortaba en el momento más delicado.
Con esta nueva ley, esos recortes desaparecen. Y la diferencia en el bolsillo es real. Se calcula que unos 3,2 millones de personas se verán beneficiadas, y algunas podrían ver un aumento de hasta $587 mensuales. No todos llegarán a esa cifra, claro. Dependerá de los años cotizados, del tipo de pensión, de si se recibe como cónyuge o como jubilado principal.
Subidas de hasta 587 dólares más al mes en los pagos del Seguro Social
Pero la mejora está ahí. Y no es simbólica. Para quien contaba cada céntimo a final de mes, ese aumento puede cambiarlo todo. La ley se aplica desde enero de 2025. Pero no todos lo han notado aún. Porque el sistema necesita tiempo. Ajustar millones de pagos no se hace en un día. Lo que sí está claro es que se aplicarán los pagos retroactivos.
Es decir, si ya te correspondía más desde enero y no lo has recibido aún, lo cobrarás más adelante. Junto al pago mensual, llegará el extra que te debían. Eso sí, hay que tener un poco de paciencia. Algunas gestiones podrían alargarse unos meses, porque el volumen de beneficiarios afectados es enorme.
merece la pena revisar los datos.
El paso a paso que tienes que seguir si no te alcanza la subida y tienes derecho a ella
A estas alturas, conviene asegurarse de que todo está en orden. Si eres uno de los posibles beneficiarios, es buena idea revisar que tus datos personales estén actualizados. La dirección, el banco, el número de cuenta… cualquier error puede retrasar el ingreso. No cuesta nada echar un vistazo y, si hace falta, contactar con la oficina del Seguro Social. Así te aseguras de que, cuando toque, el dinero llegue sin sorpresas.
Este giro legislativo no solo afecta al bolsillo. También lanza un mensaje claro: que el sistema puede corregirse, que aún se puede ajustar lo que no era justo. Y eso tiene un valor simbólico enorme. Sobre todo para quienes dedicaron décadas al servicio público y luego se sintieron castigados por haberlo hecho desde fuera del sistema federal. Esta ley les devuelve algo de lo que siempre debieron tener: reconocimiento y estabilidad económica.
El proceso de ajustes sigue su curso. Algunos jubilados ya han empezado a ver cambios en su cuenta. Otros lo harán pronto. Y aunque el calendario puede variar según el caso, lo importante es que los recortes ya no están ahí.