Diego Torres, anterior representante de Edgar Guerra, explicó por qué razón dejó de trabajar con el jugador, el motivo de la demanda y varias reflexiones acerca de los futbolistas jóvenes, de la relación con los clubes.
Hay muchos temas que Torres dejó sobre la mesa. De la situación con Guerra, en efecto ya no trabajan. El jugador cortó el nexo laboral que tenía con este representante, quien entre otras cosas fue el agente que le ayudó a cuadrar su primer contrato profesional con el club Embajador.
Edgar, contado por César Augusto Londoño, fue acercado a Millonarios por intermedio de un familiar que trabajaba en el servicio doméstico para el hogar de Enrique Camacho. Llegó menor de edad a las divisiones menores, le vieron condiciones y en el 2020 debutó. Esa parte del salto como profesional tuvo a Diego Torres en la representación. Trabajaron unos años hasta que el nexo contractual se acabó.
“Le faltaba un año, un año y medio, pero más allá de eso, nosotros fuimos las personas que en su inicio en Millonarios ayudamos a construir esa llegada y esa suscripción del primer contrato laboral, de la mejor manera, con la institución, con sus directivos, con el doctor Camacho, con el doctor Serpa, con quienes nos une una relación profesional y un respeto importante con la institución y, desde luego, con las personas. Están en todo el derecho los deportistas de tomar ese tipo de decisiones y, bueno, había que seguir adelante. Más allá del tema de Guerra es cómo crear un ambiente profesional, sano y transparente, y con categoría humana, entre los diferentes autores que confluyen en la negociación del contrato laboral de los deportistas, para que sin egos que muchas veces se ponen sobre la mesa, que no son necesarios, se puedan alcanzar esos objetivos comunes entre la institución, los jugadores, la dirección deportiva, el cuerpo técnico y, desde luego, las personas que acompañan a los jugadores. Los jugadores jóvenes a veces se aceleran y piensan que se siembra y al otro día se cosecha y, bueno, toman decisiones”, dijo Torres en una entrevista para El Alargue, de Caracol Radio.
Edgar Guerra le envió una carta a Torres, en la cual decía que termina ese contrato por justa causa. Todo está en manos de las autoridades pertinentes, quienes definirán este pleito legal.
¿Edgar Guerra está mal asesorado?
Más allá de entrar a debatir ese punto, Torres cree que a lo mejor alguien le ofreció algo a Guerra, quien si bien está en su derecho pudo ser precipitado. El futbolista tiene una oferta para irse al club León de México. Se rescinde el contrato con Millonarios, que terminara perjudicado desde lo económico más allá de algún tipo de resarcimiento.
“Los jugadores jóvenes piensan que por correr se llega primero y yo siempre aconsejo que es mejor subir las escaleras de una en una para no estrellarse. Es necesaria la preparación del jugador, de la familia, de la gente que está al rededor. Seguramente en algún momento alguien le propuso algo distinto y lo tiene en esta situación que lamento mucho”, explicó Torres.
