William Tesillo, en su primer semestre con Atlético Nacional, ya está viviendo la inmensidad de la hinchada verdolaga y así lo explica.
Es un futbolista que hizo parte de Centauros, Deportes Quindío, Santa Fe, Junior y el Club León en México. Ahora hace parte de Atlético Nacional y en sus primeros meses ya ha notado la diferencia. Es una pasión que rebasa las fronteras de la ciudad y pinta de verde cualquier estadio que visita.
“Lo que he vivido en nacional, no lo he vivido en ningún club” 👀
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En sus palabras resuena el asombro y la admiración de un jugador que, habiendo pasado por varios clubes, jamás había presenciado un fenómeno de apoyo tan contundente. “No había vivido en ningún club que llenaran otro estadio en otra ciudad y no un estadio pequeño. Fueron más de 30 mil personas”, compartió, aún maravillado.
El partido que jugó Atlético Nacional ante Fortaleza CEIF en Bogotá fue una muestra de ese amor incondicional. El Campín se tiñó de verde, con más de 30 mil hinchas que llevaron sus voces y sus banderas a cientos de kilómetros de casa. Tesillo, en medio de la cancha, no podía dejar de notar el poder de la hinchada. Era como si el Atanasio Girardot se hubiera trasladado a la capital, con la misma energía y pasión que caracteriza a la afición más fiel de Colombia.
Este tipo de apoyo no es casualidad; es el reflejo de una conexión profunda entre el equipo y su gente. La marea verdolaga no entiende de distancias, solo entiende de pasión y lealtad. Para Tesillo, cada “banderazo aquí, banderazo allá” es un recordatorio de la grandeza de Nacional, y a cada paso se da cuenta de que está en un club especial. La entrega de sus hinchas lo hace sentirse respaldado, pero también comprometido a darlo todo por estos colores que siempre van acompañados de una multitud.
Para un jugador como Tesillo, acostumbrado a grandes escenarios, lo que ha vivido con Nacional es un antes y un después en su carrera. Estas experiencias, como la de ver el Campín repleto de verdolagas, lo han marcado, llenándolo de orgullo y motivación. Cada vez que ve la hinchada llenar otro estadio, más allá de su casa en Medellín, Tesillo reconoce el honor y la responsabilidad de vestir esta camiseta.