La reacción de los aficionados locales frente a la derrota de su equipo, más si es con goleada en contra incluida, es silencio. Después, irse. Abandonar el estadio en medio de la frustración por el resultado, por la impotencia de sus jugadores. No pensar más en la humillación.
También, ya que todo esto hace parte del fútbol y no se puede pasar por alto, vienen los insultos. Gritos, reclamos y protestas. Así pasa en la mayoría de campos de fútbol, con aficionados poco tolerantes a las derrotas de sus equipos.
Por eso, comportamientos como los de la hinchada de Racing Club de Avellaneda merecen un capítulo especial. En el compromiso que perdió de local, goleado por River 6 – 1, los aficionados no se fueron. Tampoco hubo silencio. Todos cantando, en una forma de rendirle un homenaje al escudo del cual son hinchas. En el campo de juego Racing vivió una paliza, mientras que en las gradas se entonaban cánticos alusivos al amor profundo de un auténtico hincha de la Academia.
#RACING perdía 6 – 1 un clásico como local y así respondía su gente.
Distinta a las demás, la N°1 de la #Argentina.
Nadie ni nada podrá doblegar este amor. pic.twitter.com/ukWTbvkdcN
— Data Racing
