En el segundo semestre de 2024, Atlético Nacional logró un hito inolvidable al conquistar tanto la Copa como la Liga BetPlay bajo el mando de Efraín Juárez. El DT mexicano llegó al FPC para tener su primera experiencia dirigiendo profesionalmente, en una decisión que sorprendió a más de un hincha verdolaga y terminó siendo éxito total.
Elegirlo a él como director técnico tras la salida de un experimentado como Pablo Repetto, generó interrogantes al inicio. El mexicano no tenía experiencia previa dirigiendo equipos profesionales siendo el DT. Sí había estado en otros como AT, pero eso no fue relevante al momento de tomar la decisión. Gustavo Fermani, director deportivo del club, en entrevista en W RADIO explicó las razones detrás de esta arriesgada pero fructífera decisión.
Efraín Juárez liderando el cambio que necesitaba Atlético Nacional
Para Fermani, la llegada de Juárez no fue una apuesta ciega, sino una elección calculada basada en las necesidades del club en ese momento. “Decidimos el cambio, sobre todo en el cambio metodológico de entrenamiento, en el cambio del día a día y también en la conducción de grupo”, declaró Fermani. Atlético Nacional necesitaba una renovación en su enfoque de trabajo, y para ello, se realizó un exhaustivo proceso de selección.
El club armó un amplio espectro de candidatos que cumplieran con los requisitos deseados. «Empezamos a scautear para conseguir el nuevo entrenador, armamos muchas carpetas y llegamos a la hoja de vida de Efraín», reveló el director deportivo. Desde ese momento, comenzaron las charlas con Juárez, en las que su metodología y visión del juego convencieron a la dirigencia.
La metodología como factor decisivo para la decisión en Atlético Nacional
Uno de los puntos clave en la elección de Juárez fue su alineación con los principios y la filosofía de Atlético Nacional. “A través de charlas con él, empezar a conocerlo, tener muchas comunicaciones a través de Zoom, charlas de metodología, de conducción de grupo, nos dimos cuenta que estaba muy vinculado a todo lo que hacemos en el club y que habíamos iniciado a hacerlo”, afirmó Fermani.
El club no solo buscaba a alguien con experiencia, sino a un técnico que compartiera su visión de trabajo. Juárez cumplió con esas condiciones, demostrando que su idea de juego, entrenamiento y conducción de grupo encajaba perfectamente con lo que Nacional necesitaba. “Tenía nuestra misma idea de trabajo, de juego, de entrenamiento y para nosotros no era tan relevante que fuera el primer equipo que dirigía como cabeza de grupo”, explicó el director deportivo.
Apostar por Efraín Juárez, un riesgo que valía la pena tomar
La falta de experiencia de Juárez como entrenador principal no fue vista como un obstáculo por la dirigencia de Nacional. Fermani señaló que “ese no era un tema fundamental porque veíamos en él a quién podía conducir a Nacional en este momento”. La confianza depositada en el técnico mexicano fue recompensada con creces, ya que en tan solo cuatro meses llevó al equipo a la cima del fútbol colombiano.
La historia de Efraín Juárez y su éxito con Atlético Nacional es un ejemplo de cómo las decisiones basadas en la visión y la metodología pueden dar grandes frutos. Gustavo Fermani y la dirigencia del club demostraron que, a veces, vale más apostar por la idea correcta que por el currículum. El resultado: un semestre de ensueño que quedó grabado en la historia del fútbol colombiano.
