La Administración del Seguro Social (SSA) ha confirmado un aumento del 2,5% en los pagos del Seguro Social por Incapacidad (SSDI) a partir de enero de 2025. Es un ajuste para que los beneficiarios no pierdan poder adquisitivo con la inflación, algo que se hace cada año para compensar el coste de la vida.
El COLA, que es como se llama este ajuste, sirve para que los pagos del Seguro Social se mantengan en línea con el aumento del coste de la vida. Se calcula en base al Índice de Precios al Consumidor (CPI-W), que mide la inflación.
Cómo se calcula el COLA y su impacto en los pagos del SSDI
Para 2025, el ajuste será del 2,5%. Eso significa que si cobrabas $1.000 al mes, en enero recibiste $1.025. No es una fortuna, pero cualquier ayuda cuenta cuando los precios siguen subiendo.
El COLA se basa en una comparación del CPI-W del tercer trimestre de un año con el mismo periodo del año anterior. Si el índice sube, los pagos se ajustan para reflejar ese aumento. La idea es que el dinero que reciben los beneficiarios no pierda su valor real con el tiempo.
No hay que hacer nada para recibirlo. El incremento se aplicará automáticamente desde enero de 2025. La SSA enviará notificaciones a todos los beneficiarios explicando el nuevo importe de sus pagos, para que cada uno sepa exactamente cuánto cobrará con el ajuste.
El COLA del 2,5% no solo se aplicará a los pagos de SSDI. También afectará a otros beneficios gestionados por la SSA, como el Seguro de Ingreso Suplementario (SSI). En 2025, los pagos máximos del SSI serán de $967 para una persona, $1.450 para una pareja y $484 para una persona esencial. No es un aumento grande, pero sí una pequeña mejora para quienes dependen de estos pagos.
Otros cambios en el Seguro Social que entrarán en vigor en 2025
Aparte del aumento en los beneficios, la SSA ha ajustado otros aspectos relacionados con el SSDI. El límite de ingresos mensuales para que un trabajo sea considerado sustancial y lucrativo subirá a $1.620 para la mayoría de los beneficiarios y a $2.700 para quienes reciben SSDI por ceguera. Superar estos límites podría significar perder los beneficios.
También se modifican los créditos del Seguro Social, que se obtienen en función de los ingresos. En 2025, se ganará un crédito por cada $1.810 de ingresos, hasta un máximo de cuatro al año. Para optar a los beneficios de SSDI, suelen ser necesarios 40 créditos, de los cuales 20 deben haberse obtenido en los últimos 10 años antes de la discapacidad.
Para que la transición sea lo más sencilla posible, conviene estar preparado. Es importante comprobar que la información bancaria y los datos personales estén actualizados en la SSA, para evitar retrasos en los pagos. También se recomienda revisar la cuenta en «my Social Security» para confirmar el ajuste y verificar el historial de pagos. Además, es clave estar atento a las notificaciones oficiales de la SSA, ya que detallarán cualquier cambio relevante.
Mantenerse informado sobre estos ajustes es esencial para planificar bien las finanzas personales. Si hay dudas o se necesita más información, lo mejor es visitar la página oficial de la SSA o ponerse en contacto con ellos directamente.