El efecto Heung-min Son


Con una máscara de protección facial, Heung-min Son, la máxima figura de la Selección de Corea del Sur, se estrenó en Catar 2022.

El atacante que juega en el Tottenham de la Premier League (compañero de Dávinson Sánchez) sufrió una fractura en el pómulo izquierdo, durante un partido de Champions League frente al Olympique de Marsella.

Fue un tema tan delicado, que hasta se puso en riesgo su presencia con Corea del Sur en la Copa del Mundo. Para preservar su salud, los médicos le hicieron una cirugía con el fin de estabilizar aquella zona fracturada.

La máscara fue la solución indicada, de manera que no interviniese en sus planes de competir con la selección de su país. Tras algunas dudas acerca de si le alcanzaba para estar en la apertura del Grupo H contra Uruguay hubo luz verde. Podía jugar.

Salió como titular en el Estadio de la Ciudad de la Educación. Ídolo en su país, las muestras de cariño con Heung-min Son se simbolizaron mediante el uso de mascarillas. Muchos fanáticos lucieron artefactos faciales semejantes a la suya. Algunos adaptaron antifaces. Lo que sea, con tal de parecerse a su gran referente, de apoyarlo.

¿Quién no se emociona con semejante gesto? El delantero, además, es el capitán de su seleccionado.

Heung-min Son, ídolo de multitudes

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