Durante algunos años siempre se relacionó el nombre del delantero polaco Robert Lewandowski con Real Madrid. ¿Por qué nunca llegó?
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La verdadera razón tiene mucho que ver también con el delantero francés Karim Benzema. Además, ha sido la vez que más cerca estuvo el Real Madrid de contar con Robert Lewandowski, actualmente en el Bayern Múnich y con contrato vigente en ese club hasta el 30 de junio del año 2023.
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Fue en el año 2014, cuando el ariete polaco había hecho fama de goleador implacable en el Borussia Dortmund. En ese tiempo el Bayern Múnich fue el primer club interesado, con propuesta formal sobre la mesa y todas as condiciones servidas para hacer efectivo el fichaje, hasta que a manos del agente que tenía en ese entonces Lewandowski, Cezary Kucharski, recibió la oferta del Real Madrid.
No solo era superior desde lo económico. El solo hecho de estar en uno de los clubes más importante del mundo hizo que la propuesta del Bayern estuviera a punto de caerse. “Estaba todo acordado pero dos semanas antes de que firmara les dije a los dirigentes del Bayern que Robert se iba a ir al Real Madrid por una mejor oferta”.
¿Por qué se cayó la llegada de Lewandowski al Real Madrid?
La parte que le falta a esta historia tiene algo que ver con Karim Benezema, atacante francés que hoy en día es la principal carta ofensiva en el cuadro dirigido por Zinedine Zidane. Robert Lewandowski estaba prácticamente listo para arribar a Madrid hasta que le dijeron algo que cambió por completo el fichaje. Lo arruinó.
Ese “algo” era la suplencia. En palabras de Kucharski:
“Las condiciones económicas que nos ofrecía el Real Madrid eran mejores que las del Bayern. Pero la diferencia es que en el club español no iba a ser titular sino el suplente de Karim Benzema”.
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Ser suplente era algo para lo cual no estaba listo Lewandowski, así que en definitiva terminó como jugador del Bayern Múnich, donde sus registros goleadores parecen no tener techo. Un goleador que con 31 años está cotizado en cerca de 51 millones de euros.
Por si fuera poco, en ese entonces el Bayern también hizo una última oferta, mejorando las condiciones salariales del jugador polaco. “En Múnich se enojaron bastante y hasta escuché algunas palabras desagradables. Pero la directiva estaba tan interesada en ficharle que se convencieron de que tenían que subir su salario y acabaron sumando 25 millones de dólares al contrato”, contó Cezary Kucharski.