El estiramiento prolongado por más de 30 segundos no siempre es el mejor. No tiene que tomar mucho tiempo, y a veces, es mejor que no sea así. Pero, ¿para qué estiramos? Bueno, el estiramiento se considera cada vez más como una de las mejores maneras de reducir la tensión y mejorar el movimiento. Sin embargo, hay diferentes maneras de estirar, y algunas pueden hacer más daño que bien, dependiendo de las circunstancias.
Si estiras de maneras que mueven tu cuerpo fuera de una postura habitualmente fija o disfuncional, puedes prevenir la tensión y el dolor crónicos. Esto puede ser especialmente útil para las personas que sufren de dolor lumbar crónico. Es mejor estirarse en todos los planos de movimiento sagital, transversal y frontal, usando ambos lados de todo el cuerpo.
Por otra parte, si estiras para prepararte para una actividad que requiere fuerza muscular y potencia, como un calentamiento para una rutina de ejercicios, una carrera o un evento deportivo, el estiramiento dinámico de corta duración es más beneficioso que el estiramiento estático más prolongado, que puede afectar el rendimiento.
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Los estiramientos más prolongados pueden aumentar el peligro de llevar demasiado lejos un estiramiento y causar un desgarro o distensión muscular o, peor aún, laxitud del ligamento e inestabilidad de las articulaciones.
Además de hacerlo en la primera hora de la mañana, es bueno estirarse después de largos periodos de estar sentado frente a un escritorio o de viaje, así como antes y después de los entrenamientos. También es buena idea estirarse antes de dormir, incluso unos minutos antes de acostarse, para evitar que cualquier tensión persistente pueda producirte un sueño inquieto.
Los estiramientos son muy importantes para cada uno de nosotros. Es necesario mantener estas ideas claras para no maltratar los músculos y los nervios de nuestro cuerpo.